Do It For Me ||Ferran Torres||

○●D i e z●○

ᴍᴀɴᴄʜᴇsᴛᴇʀ, ɪɴɢʟᴀᴛᴇʀʀᴀ. 𝟸𝟼 ᴅᴇ ᴀɢᴏsᴛᴏ ᴅᴇ 𝟸𝟶𝟸𝟷.

—¿Entonces ninguna de las dos vais a estar esta tarde?

—No.

—Pues vaya mierda.

—¿Por qué no quedas con alguno de los chicos?—Sophie meditó la proposición de Vega, y recordó la oferta de Ferran.

—Pues sí, lo voy a hacer.

—¿Y con quién te vas a ir?—preguntó Kaira.

—Con Ferran. Le dije que me iría a entrenar con él.—Kaira y Vega se miraron entre ellas con una media sonrisa y volvieron a mirar a la pequeña.

—Has quedado con mi hermano.

—Sí.

—Para entrenar.

—Eh... ¿Sí?

—Usa condón.

—¿Qué? ¡Vega!

—No quiero ser tía tan pronto, y no creo que tu quieras ser madre.—comentó la valenciana con gracia.

—No voy a acostarme con Ferran.

—Eso dices ahora. Deja que pasen un par de citas más.

—Y tampoco es una cita.

—Eso decimos todas, y al final sí que lo acaban siendo.—dijo Kaira, logrando que esos dos pares de ojos se posaran en ella.—¿Qué?

—¿Acabas de admitir que tus quedadas con Phil son citas?—preguntó Vega.

—Sí, ¿y? Era un secreto a voces eso.—respondió la chica encogiéndose de hombros.

—O sea, que...

—La merienda de esta tarde es nuestra...—hizo cálculos mentales sobre las quedadas que había tenido con el futbolista.—¿Quinta cita? Sí, creo que sí.

—¿Y cuándo te va a pedir salir?

—Buena pregunta, me encanta que me hagas preguntas para las que no tengo respuesta.—dijo, logrando que Sophie riese.

—¿Y tú qué vas a hacer?—preguntó la pequeña mirando a su mejor amiga.

—Le prometí a Kai que tendríamos una tarde de películas y comida basura.

—¿Has hablado ya con él?—preguntó Kaira aquella vez.

—No, y no creo que lo haga.

—Pero...

—Mira, puede que yo no sea una experta en el amor.—interrumpió Sophie.—De hecho, nunca me he enamorado. Pero te prometo que nunca he visto a alguien mirar a otra persona como él te mira a ti. Y sinceramente siento hasta cierta envidia, porque a mí me encantaría que me mirasen así.

—¿Así cómo?

—Como si quisiera que fuese la persona con la que pasar el resto de su vida.—aquella confesión dejó a sus compañeras de piso completamente sin palabras.—Dicho esto, me tengo que ir. Os veo luego.—se despidió de las dos y salió del apartamento.

—¿Ha tenido las santas narices de...?

—¿De decirte eso cuando Ferran la mira así? Sí, las ha tenido.

Sophie se subió en su coche, y tras conectar su móvil a la radio del vehículo condujo hasta la casa del futbolista. Cuando llegó, frenó y tras coger su bolsa con sus cosas se acercó a la puerta. Una vez que llamó, esperó pacientemente hasta que el chico le abrió.