Reset。 ❘ Diabolik Lovers【Terminada】

● Luces ○

–Hey, chicos... ¿Mini-Neko-Chan realmente estará bien con esto? –

Los Mukami podían observar cómo Mai platicaba con Ruki y Tsubaki, aunque no estaban al 100% seguros de que esta estuviera cómoda en aquella situación.

–Yo no veo que le moleste –dijo Yuma

–No sabes nada sobre los sentimientos de las mujeres -.-  –dijo Kou – Obviamente no va a mostrar que le duele ver a Ruki y esa chica juntos.

–¿Y por qué debería dolerle? –

–Yuma... ¿En... serio? – Azusa se dio un face-palm

–Lo que era para las neuronas del danonino se fue a tu estatura –dijo Kou

–Se llama "déficit de atención" T.T –

–Espero... que Ruki... realmente... no sepa... lo que está causando... –

–Lo sabe, por eso lo hace. –dijo Kou – Porque él está tan enamorado de Mai como ella lo esta de él.

Un ring-ring se escuchó por todos los pasillos del Instituto marcando el comienzo de las clases.

–Ah, la campana... es mejor que vayas a tu salón, Mai. Nos veremos más tarde. –

–Oh, es cierto... – Mai alzó la mirada. – Adiós, Tsubaki-san.

–Fue un gusto conocerte, Mai-chan – Tsubaki sonrió y volteó al igual que Ruki. Ambos caminaron a sus salones.

Mai suspiró y bajó la mirada al suelo.

–Es algo que tenía que pasar, Mai... –dijo a sí misma.

–¿Ah?... ¡Hey! –

–¿Eh? –la albina volteó para ver quien la llamaba – ¡Natsuo...! tú siempre llegas tarde a la escuela, ¿no es así?

–Sí... –Natsuo trató de recuperar el aire. – El autobús nunca pasa a tiempo.

–Ya veo... – Mai sonrió. – Natsuo... no me siento tan bien. ¿Podrías cubrirme? Iré a dar una vuelta por la escuela.

–¿Qué sucede? ¿Estás enferma? –

–No, sólo estoy un poco cansada. –

–Bien... –El azabache miró a Mai por unos segundos. – ¿A dónde deberíamos ir?

–¿Eh? –dijo Mai. – ¿Me acompañarás? ¿No te importa perder una clase?

–¿A ti te importa? –

–Realmente no. –

–No se diga más. –el mayor sonrió. –¿A dónde te gustaría ir?

–¿Te refieres a... fuera de la escuela? –

–No exactamente a eso... pero podemos ir a la ciudad. –

–¿¡E-en serio, me llevarias!? –

–C-claro, si quieres... –

–¡Si! ¡Vamos, quiero conocerla! –

[...]

Los orbes rojizos de Mai se iluminaban con cada pequeña cosa de la ciudad que miraba.

–Es... ¡Tan hermoso! ¡Hay muchas luces, y cosas que no había visto antes! –

–¿En serio es la primera vez que vienes? –

–Sí. Mi familia vive muy lejos de la civilización, y no son de esos que salgan frecuentemente... –

–Ya veo... – a Natsuo se le ocurrió una idea. – Entonces por ser la primera vez te llevaré a un lugar especial.