Capítulo 14: El beso

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Narrado por Jacob Peterson:

Ya era el día de la primera junta con los empresarios, estaba muy emocionado era lo que había esperado desde que salí de la universidad, y también estaba emocionado porque la chica hermosa estaría allí las dos cosas que más esperaba.

Me termine de parar de la cama y me fui a duchar, después de salir de la ducha busque mi ropa, terminé por ponerme un traje gris con una camisa elegante blanca, y mis zapatos elegantes.

Me mire la mano y recordé lo suave que era la mano de la chica hermosa, lo bien que olía, no dejaba de pensar en ese momento que duro tan poco, pero que fue uno de los mejores momentos de mi vida. Termine de arreglarme y fui al cuarto de la Señorita Sommer.

Al llegar vi el número del cuarto y si era el 133, después arregle mi traje y mi cabello, toque unas 3 veces y abrió estaba en bata de baño y con el cabello mojado, acababa de salir de la ducha la mire y le dije:

 ─Buenos días chica hermosa, ¿Cómo amaneciste? ─ pregunté mientras me miraba con una cara de quererme matar.

Ella solo me cerró la puerta en la cara, pero no me molesto, me dio risa que fuera tan infantil por no quererme hablar, «pero no me voy a rendir» , dije en mi cabeza, toque una y otra vez pero nada, vi mi reloj deje de tocar y fui a mi cuarto a preparar mi bolso con los diseños.

Ya faltaban 10 minutos para la junta, yo estaba abajo con el chófer y la chica hermosa no llegaba, después de un rato volví a ver mi reloj y con lo que me encontré me dejó sin habla, era ella Sommer, venía saliendo del hotel, con un vestido color azul oscuro que le hacía ver sus curvas, unos tacones color negros, su cabello teñido color gris recogido con una cola alta, y un poco de maquillaje- de verdad era completamente perfecta- se acerco a el auto y le dije:

 ─Por Dios, estas preciosa chica hermosa ─comenté con la boca abierta.

Solo se adentro en el auto y se sentó, yo de inmediato me senté a su lado viéndola de arriba a abajo, no podía cree que era ella estaba tan cambiada, después de unos minutos de estar viéndola como un verdadero idiota el chófer nos avisó que ya habíamos llegado, como todo un caballero salí rápidamente y le abrí la puerta, pero ella decidió salir por la otra puerta, dejándome como un bobo con la puerta abierta, salí corriendo para alcanzarla y le dije:

─¿Oye que te hice para que no me hables?

Ella me miró y siguió caminando, llegamos a la recepción y una señorita alta, con el cabello largo nos dio la bienvenida a la empresa y Sommer le dijo:

 ─Buenos días, señorita venimos a la junta con el señor Lank ─dijo seria.

Por Dios al escuchar su voz me hizo sentir en el cielo, me deje llevar por mis pensamientos cuando la señorita de la recepción me dijo:

 ─Señor, la sala de junta esta a el final del corredor a la derecha ─dijo, con mucha amabilidad.

 ─Muchas gracias señorita ─añadí buscando a la chica hermosa, que ya iba lejos de mi.

Caminé rápidamente hasta que llegue a donde estaba ella y dije:

 ─Deja de torturarme chica hermosa, no se que quieres de mí.

 ─Que me dejes en paz y que te alejes de mí, eso quiero ─contestó muy seria.

 ─Eso no lo haré nunca ─confirme poniéndome frente a ella, viendo sus ojos y después bajando la mirada a sus labios.

Me rodeo y entro a la sala de juntas en donde se encontraban cuatro empresarios, saludamos a todos y no de ellos se levanto de su silla y se acerco a la Señorita Sommer, ella se acerco a mi y dijo:

 ─Señor Scott Lank le presento al señor Jacob Peterson, el diseñador.

  ─Un gusto conocerlo señor Peterson ─ estrechando mi mano.

 ─El gusto es mío señor Lank.

También me presentó a 3 empresarios más que se llamaban Jeremy Milch tenía alrededor de 31 año, Christian Penz que tenía como 28 años y Fernando Wolff este era un poco más joven como de unos 26 años.

De inmediato presente mis diseños, después de terminar todos me dieron su opinión:

 ─Señor Peterson debo decir que estos serán uno de los autos que mas se venderán ─dijo sonriente el señor Penz.

 ─Estoy de acuerdo ─confirmo el señor Milch.

 ─Yo igual me encantan todos los diseños ─exclamo el señor Wolff.

 ─Bueno si no hay más que decir, habrá que firmar el contrato señorita Watson ─dijo el señor Lank.

 ─Por supuesto, señor Lank ─respondió con una sonrisa cerrada.

Luego de firmar el contrato, nos despedimos de todos y nos diríamos a la salida, tuvimos que esperar a que el chófer llegara y en ese momento aproveche para decirle:

 ─Sabes que me gustas mucho, como quieres que te lo demuestre Sommer.

 ─No quiero que me demuestres nada y sabes que yo no te quiero ni un poco, así que déjame en paz ─dijo con mucho carácter, uhhh eso dolió pero yo se que eso es mentira.

En ese momento decidí que ya era suficiente quería probar si eso era verdad, la tome del brazo y rápidamente la sujete de la cintura y la bese, sus labios eran suaves y deliciosos, es algo que no puedo describir; ella se trataba de soltar de mi pero finalmente se dio por vencida, agarrando mi cabello acercándome con fuerza a sus labios, ya no era un beso suave era salvaje y lleno de deseo hasta que el beso termino y la solté. De repente después que tuvo aliento, me dio un puñetazo en el rostro y me tiro al suelo y me dijo:

 ─No te atrevas a hacer eso otra vez, ni a tocarme, no tienes ningún derecho a tocarme ─me advirtió molesta, pero en sus ojos pude ver que le gusto.

 ─Chica hermosa yo estoy loco por ti ─dije tirado en el suelo con la mano en mi mejilla golpeada.

 ─Como demonios puedes decir eso, si tienes novia ─dijo ruborizada.

 ─Oye ¿De que hablas?, yo no tengo novia ─conteste parándome lentamente.

 ─Eres un idiota ─contestó pegándome en el estomago.

 ─Por dios tienes mucha fuerza ─dije sin aliento.

 ─No seas tan poco hombre ─farfulla, estando frente a mi.

─ ¿Cual chica? ─dije con la otra mano en mi estomago.

 ─La chica que estaba en la empresa, la despeinada, esa novia idiota ─respondió muy enojada.

Ahí fue cuando recordé que el día de la junta, Sommer me vio con Becca, pero no entendía porque creía que éramos novios y rápidamente contesté.

─Esa chica es mi mejor amiga, se llama Rebeca ─respondí, con una sonrisa burlona en mi rostro.

 ─Si claro tu mejor amiga ─dijo con una sonrisa triste.

 ─En serio, quieres que la llame por teléfono ─conteste sacando mi celular.

 ─No quiero nada que ver contigo okay ─respondió alejándose de mi.

Y en eso llego el chófer y me dijo:

 ─Ahora te vas en taxi ─subiéndose en el auto, y se fueron.

Nota de la autora:

Ahhhh se besaron :* espero que les guste el capítulo déjenme sus comentarios y voten si les gusto.


El Juego Del Destino [Libro 1] #PGP2018Where stories live. Discover now