Cáncer ➳ jalonso.

t r e c e. (final)

Bueno, como no quise poner un final triste, las dejaré con este final, chjao. <3

—Mierda... —Susurro con un gran dolor de cabeza.

—Ya está despertando. —Dice Bryan mirándome, y atrás de él está Alonso.

¿Qué demonios estaba pasando?

—¿Acaso ya estoy en el cielo? —Pregunto sobando mi cabeza.

—No, tonto. —Bryan rie. —Estás en el hospital, tomaste una sobredosis de medicinas. Al parecer intentaste suicidarte pero no lo lograste. —Lo miro confundido.

—Las radiografías estaban mal. —Ahora habla Alonso. —Estoy bien, Jossy. —Se acerca a mí, y planta un beso en mi frente.

Me recuesto en la camilla y cierro fuerte los ojos. No entendía muy bien cómo es que sobreviví.

—Tendrás que quedarte aquí unos días. —Se separa un poco de mí. —Te desintoxicarán, no debiste tomar medicinas de manera excesiva.

—Lo siento. Creí que ibas a morir, pero ahora que me dices que no, estoy un poco más tranquilo. —Sonrío. —Por cierto, ¿leíste la última nota?

—¿Qué nota? —Pregunta con una mueca de confusión.

—La que estaba a un lado de mí cuando intenté suicidarme. —Respondo de la misma manera.

—No tenías ninguna nota, solamente era una hoja con garabatos. Sí pensamos que estabas muerto, por suerte no. —Contesta Bryan viéndome.

Bryan sale de la habitación y Alonso se recuesta a un lado de mí, acaricia mi pecho y disfruto de su presencia. Amaba mucho que hiciera ese tipo de cosas, de esa manera me sentía seguro.

—No sabría qué hacer si algún día te llegara a perder. —Susurra.

Sentía una serie de emociones cada vez que me decía algo lindo. Me sentía como una niña, y odiaba eso. Siempre lograba hacer que todo ese lado ‘rudo’ de mí se esfumara.

Empecé a pensar en que exageraba un poco con decir que ya estaba solo y todas esas cosas. Pero no, nunca estuve solo. Nunca me abandonaron. Bryan, aunque yo me comportara como un patán con él, seguía ahí, apoyándome y acompañándome en cualquier tontería que yo hiciera.

—Alonso. —Lo llamo y voltea a verme. —Creéme que sería algo tonto si llego a intentar acabar con mi vida de nuevo, te amo, y aunque parezca lo contrario. Me volvería una pasiva feminista por ti. —Comienza a reir al escucharme decir eso.

—Te amo tanto, que podría dejar de ser zorra por ti. —Lo miro como si estuviera enojado y empieza a reir más fuerte.

Se sube encima mío y empieza a besarme, coloco mis manos sobre su cintura.

No diré que él es la mejor persona del mundo. Pero sí es la más perfecta.

Mi vida no es la mejor, pero si algo me gustaría hacer, es vivirla al lado de Alonso. Siempre.

“No existe alguna otra manera de curar el cáncer más que la fé y el amor.”