Embarazado de un idiota 「Yoonkook」

Episodio 5

(Semana 10 de embarazo, tercera ecografía del bebé)

— Puedes dejarme aquí —Jungkook le dijo a Jin, pero este lo ignoró.

— Te dejare frente al hospital Jungkook —insistió.

— Llegarás tarde donde Namjoon.

— Él entenderá.

El menor bufo y se revolcó en su asiento.

Cuando Jin lo dejó en la entrada del hospital sintió la necesidad de salir corriendo de ahí. Pero no podía hacer aquello, tenía un ultrasonido programado para hoy dentro de quince minutos. Bien podía llamar y cambiar el día y hora de su cita, pero no iba a hacerlo solo porque Yoongi estuviera parado en la entrada del lugar.

Tragó grueso y se dispuso a caminar dentro del lugar sin que Yoongi lo viera, pero no fue así. Este lo tomó del codo y lo hizo que girara hacia sí.

— Suéltame —exigió el más joven—. Estoy llegando tarde —mintió, aún tenía el tiempo suficiente.

— Eso no es verdad, aún te quedan quince minutos.

Jungkook se soltó de su agarre y lo miró furioso.

— Primero te largas dejándome solo, cuando estoy esperando a TU hijo. Luego me apareces con tu puta y ahora, ¿me espías? —escupió Jeon.

— Venus no es una puta —corrigió Min, pero eso solo hizo enojar más a Jungkook.

— Sabes que reconozco a una puta cuando la veo —Jungkook elevó la voz—. Y ella no se queda atrás, querido. Ahora si me disculpas tengo un ultrasonido al que ir —Jungkook intentó seguir con su camino, pero nuevamente Yoongi lo tomó del codo.

— Solo déjame verlo, tan solo una vez — pidió.

Jungkook volvió a soltarse de su agarre, esta vez un poco más brusco.

Observó a Yoongi y maldijo por lo bajo.

— Solo una vez —dijo.

El de pelo azabache entró en el hospital con Yoongi detrás de él. Subieron las escaleras hasta el quinto piso. Jungkook saludo a la recepcionista y a algunas chicas y chicos que estaban ahí esperando para su cita. Al principio se sintió extraño al ser el único hombre sentado en aquella sala de espera, pero eso solo fue la primera vez que estuvo aquí para un ultrasonido. A La siguiente ocasión se encontró con que varios chicos también venían, ya sea con el mismo obstetra que Jungkook o con alguno de los otros dos en este piso.

El menor espero pacientemente los minutos faltantes para su ultrasonido, platicando alegremente con un chico que estaba al lado suyo, este tenía un prominente abdomen, lo cual indicaba que solo faltaban unas cuantas semanas, o quizá días, para que diera a luz. Jeon no veía la hora en que su vientre fuera tan grande como el del chico, tampoco veía la hora de que su pequeño llegara al mundo, y tampoco veía la hora en que lo cargase entre sus brazos por primera vez.

Después de un rato el chico fue llamado por uno de los obstetras y casi al mismo tiempo Jungkook fue llamado por su obstetra.

— Hola de nuevo Jungkook —saludó el obstetra, el chico le devolvió el saludo con un movimiento de cabeza—, ¿Y este joven de aquí? —preguntó cuando noto a Yoongi— ¿Es el afortunado padre?

— Sí —contestó Jungkook, más a fuerza que de ganas.

— Pues, felicitaciones joven... —trató de completar el obstetra.

— Yoongi, Min Yoongi— contestó el pelinegro extendiendo su mano hacía el hombre.

— Yoongi —el médico estrecho la mano del más alto—, bueno, ahora. Jungkook ya sabes que hacer querido.