La Llamada | Stony

Parte V

Parte 5:
Peligros y paraderos

Me encontraba de pie —ya que con anterioridad estaba dispuesto a irme a entrenar—, no sabía que pensar; era imposible que la persona a la cual le pretenecia aquella voz estuviera presente. Giré mi cabeza hacia la derecha y enfoque a la joven Wanda, esta no veía en mi dirección si no hacia atrás, al seguir la mirada de la maga me quede anonadado. Sharon se encontraba a un lado de T'Chall, detrás de donde Wanda estaba sentada, las puertas detrás de ellos se cerraban con lentitud.

No tenía cabeza para lo que estaba sucediendo, ¿estaba soñado?

—Hola, Steve —Me saludo la bella dama sonriendo lo suficiente como para que sus hoyuelos se marcarán levemente.

—Sharon —Su nombre fue todo lo que pude decir al estar aún conmocionado—, ¿cómo? —pregunté con incredulidad.

—Bueno —sonrió—, llevó un par de meses siguiendo los pasos del gobierno e informando a un aliado a través de su personal, no sabía que ese aliado era su alteza —dijo al apuntar a T'Challa con su mano izquierda—. Hace unas semanas tuve el privilegio de hablar con él cara a cara y no entendía porque se había puesto en contacto conmigo si hasta donde tenía entendido su alteza había firmado los acuerdos. Fue allí donde me hablo de lo que sucedía, y viene a ayudarles —complementó resumiendo aparentemente algo que había estado pasando durante estos meses.

—¿Cómo se pusieron en contacto? —preguntó está vez Sam ganándose mi atención por unos segundos hasta que regrese mi vista a aquellas dos personas que acababan de entrar al comedor.

—El Capitán dijo que la agente Sharon Carter les había ayudado a conseguir sus trajes y en otras ocasiones meses atrás —explicó T'Challa al ver en dirección a Sam—. Ella ha sido de buena ayuda estos meses, me ha informado de los movimientos en Estados Unidos. La agente cree que podrían ir a Italia y quedarse ahí un tiempo debido a que el gobierno de los Estados Unidos ha entrado a Wakanda —pausó brevemente—, no aquí con exactitud pero están rondando estas áreas —Se corrigió—, no pensé que sospecharían de mí pero por alguna razón están aquí. Por el bien de ustedes y el del pueblo, Sharon se ofreció a ayudarme a buscar algún lugar seguro donde ustedes puedan quedarse —agregó con seriedad T'Challa—. Su amigo Barnes se quedará aquí, Capitán, ese no será un problema, puedo esconderlo —Asentí levante en entendimiento al girarme de cuerpo completo a verles—, la agente Sharon estará aquí para darnos información y ver la situación con los agentes que rondan mis terrenos.

—Así que... ahora considérenme una de ustedes —sonrió Sharon, mostrando hasta las encías—, y creo que ya tengo un buen lugar en Italia pero todo es dependiendo de que suceda en estos meses, hasta ahora solo hemos visto algunas personas del FBI aquí, así que todo es dependiendo de lo que suceda.

—Bueno, Italia no suena mal —dijo Sam algo animado.

—Mejor que esta jungla —coincidió Scott.

—Bien, si me permite le mostraré dónde podrá quedarse —habló T'Challa haciéndose hacia un lado para que Sharon caminara, la misma pasó a un lado mío dedicándome una fugaz sonrisa mientras ella y su alteza se esfumaban del lugar tan rápido como habían llegado.

Me encontraba aún algo pasmado, no había esperado ver a Sharon pero me alegraba haberla visto, en verdad me alegraba verla.

—Así que, Steve...—escuché a Scott alargar mi nombre haciéndome voltear a verle.

Al voltear me tope con tres hombres viéndome con unas extrañas sonrisas en sus rostros.

—¿Qué? —cuestioné desentendido.