Peter P. & Tom H. Imaginas

002 - Peter Parker

"Terminar" Parte 1/2

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—¿Es que ya te aburriste de mi, Peter? —pasé mi mano por mi rostro apretando el puente de mi nariz al sentir la picazón del llanto que se aproximaba.

—No, escucha —tomó mi mano obligándome a verlo. —No sabes lo importante que eres para mi, te quiero demasiado...

—¿Pero qué Peter? Ya casi no pasamos tiempo juntos —mis ojos se llenaron de lágrimas, nuevamente.

—Lo sé y lo siento tanto, no te mereces esto —se acercó uniendo nuestras frentes permitiéndome sentir su cálida presencia.

—No es eso, Peter...

—No, escuchame —me interrumpió. —Tienes toda la razón, sé que te he descuidado cariño, no mereces esto, no mereces el poco tiempo que te dedico —se fue separando cada vez de mi, mientras yo no podía creer lo que decía. —Creo que lo mejor es...

—¿Hechar esto a la basura? ¿Terminar? —me apresuré a contestar, sintiéndome enfadada y triste. Al parecer había dado en el blanco, por la manera en la que se quedó expectante. Sentí dolor en mi pecho a la par en la que pensaba que ese era su punto, después de todo, quizá es por eso que cada vez estaba menos apegado a nuestra relación, él quería terminar.

—Yo... —cerró sus ojos un momento para luego evitar mi mirada. —Creo que sí.

Ahora la distancia que habíamos tomado era notable.

Nos quedamos compartiendo miradas en un ahora, incómodo silencio.

—Hecho, Parker —me volteo para evitar que él vea como las lágrimas por fin se liberan de mis ojos y corren con prisa por mi rostro.

_______ no pudo ver como los ojos de Peter también compartían el mismo sentimiento.

(...)

Los corazones rotos son cosa de cada día, al igual que la escuela. Así que pese a lo triste que me sentía por no entrar y correr a saludar a Peter, abrazarlo por detrás o sorprenderlo, como cada mañana, tenía que caminar hacia mi casillero teniendo que soportar el verlo de cerca pues el suyo quedaba a unos seis pasos del mío.

Suspiro al ver mi horario, no tenía ganas de estar en el laboratorio.

Remuevo dentro buscando mi cuaderno cuando de pronto algo toca mi cadera y me hace saltar en mi lugar.

Volteo y me encuentro con Flash, ¿pero qué...?

—Hola cariño —me sonríe amablemente y esa actitud me extraña.

Antes no me sorprendía pues el solía coquetearme todo el tiempo descaradamente, hasta que comencé a salir con Parker y la rivalidad entre ambos aumentó.

—Que hay —estaba por voltearme a seguir con mis cosas cuando se apoyó en los casilleros buscando mi atención.

—Oí que terminaste con Parker.

Esta vez toda mi atención se enfocó en él.

—Qué rápido corren los rumores —elevé mis cejas un tanto molesta.

—Sí... ¿Qué te parece comer conmigo hoy? Sentarnos juntos en la cafetería, puedes invitar a tu amiga la come-libros.

—Su nombre es Michelle, y como sea.

—¿Eso es un sí? —levantó un ceja inclinándose hacia mi.

Que insistente.

—Es un "como sea".

—Perfecto —tocó mi barbilla con su pulgar en un gesto raro.

Cuando estaba por irse, Peter pasó por nuestro lado rápidamente, con el ceño fruncido y la mandíbula tensa.