Capítulo 11

1.4K 96 13
                                    

- Lo siento, - soltó y mi corazón empezó a latir frenético sólo al oír su voz- no pretendía asustarte.

Su cabello estaba echo un desastre, apuntaba a todos lados como si hubiese pasado mil veces sus manos por él, sus ojos estaban surcados por oscuras ojeras, nunca antes lo había visto así de desaliñado pero a pesar de todo se veía hermoso, casi irreal.
Él se apartó haciendo un gesto para que yo entrara.

- Te llamé muchas veces, te escribí. Yo... Sólo dame unos minutos, permiteme explicarte.

Yo solo asentí y sentí su mano posarse en mi espalda guiandome. Salté ante el contacto y levantó ambas manos en gesto de paz mientras me señalaba el estudio con una de ellas. Yo empecé a caminar y podía sentirlo detrás de mi.

El entró, cerró la puerta y me invitó a sentarme. Yo me negué y en su lugar caminé hasta ponerme en frente de las fotos que estaba contemplando la única vez que había entrado aquí.

Lo sentí caminar hasta mi y pararse a mi espalda. Yo estaba echa un mar de nervios, mis manos sudaban, mi corazón martillaba en mis costillas y  para ser sincera no estaba segura de querer escuchar lo que él tenía que decir.

- Siento que hayas salido de aquí teniendo una impresión errada de lo que sucedió. Todo lo que ha pasado hasta ahora ha sido por mi culpa, porque no fui sincero a tiempo y todo se  complicó así que no pienso darle más vueltas al asunto.- se detuvo y lo oí suspirar.

- Te amo.- Soltó de repente y yo me volteé bruscamente sintiendo que mis ojos se saldrían de sus cuencas de la impresión. Mi mandíbula casi llegó al piso ante eso. Y un recuerdo lejano se abrió paso en mi mente, él me lo dijo, ese día antes de caer en la inconsciencia yo lo escuché pero pensé que era producto de mi imaginación.

- Te amé desde el día en que te vi entrar en mi casa con tu cabello suelto y una cinta roja alrededor de tu cabeza, llevabas un vestido azul, tu ojos miraban curiosos a todos lados y yo creí que eras un ángel caído del cielo. Fui tan estúpido, tan inmaduro.- dijo pasando el dorso de su mano por mi cara para luego con su pulgar dibujar el borde de mi labio inferior. Yo sentí mis piernas volverse gelatina y contuve la respiración.

- Sólo era un niño tonto que no sabía como decirle a esa hermosa niña todo lo que le hacía sentir. Sentía tantos celos al verte interactuar con Sergio pero casi ignorarme a mi que busqué la forma, la peor forma, de hacerme notar.-

Lo oía hablar pero no era capaz de hilar ningún pensamiento. Su olor, su caricia y el calor de su cuerpo tenían mis sentidos embotados.

- Al pasar los años pensé que te había superado, creí que había sido solo un enamoramiento infantil. Cuando Sergio me dijo que vendrías yo sólo estaba expectante, pensé en disculparme por mi inmaduro comportamiento años atrás y quizás contarte el motivo, reírnos de mi inmadurez del momento. Entonces te vi ese día y tuve la certeza de que habías llegado a poner mi mundo de cabeza de nuevo.

Sebastián flash back

Había tenido un almuerzo en casa de Nina y a media tarde me llegó un mensaje de Sergio informándome que Camila y su madre ya estaban en casa. Me despedí y al llegar me conseguí ya a Sergio con tia Nancy. Ella me saludo con un abrazo comentando lo alto que estaba y lo guapo que le parecía, yo le agradecí y los tres nos sentamos a conversar en la sala. No había pasado una hora cuando sentí pasos por las escaleras y los ojos de Nancy viajar sobre nosotros y llamar a su hija.

Cuando la vi todo volvió a mi, estaba más hermosa de lo que nunca esperé, piernas torneadas y cremosas, trasero redondeado y respingón, cintura estrecha pecho lleno aunque no grande, su cabello estaba amarrado dejando escapar algunos mechones y su cara seguía teniendo ese aire angelical. Me quedé absorto detallandola mientras ella hacia lo mismo con mi hermano y yo sentía los celos bullían en mi, sabía que estaba mal pero no podía controlarlo. Ella había cambiado físicamente, sí había crecido pero sus ojos seguían pegados a Sergio. Me las arreglé para estrechar su mano y salir rápidamente antes de cometer una estupidez.

VIVIENDO CON MIS "PRIMOS"Where stories live. Discover now