Como les decía Amanda y Tanel habían tenido intimidad pero aunque el ángel se sentía culpable, se sentía muy bien pues amaba a la joven y ella a él por lo que siguieron en una relación de una mortal con un ángel así por un par de meses.
Marruel e Ivilin no interferían pues así el ángel al inmiscuirse con una mortal, comenzaría a perder sus poderes siendo así un mortal más algo que ya había ocurrido siglos atrás por lo que muchos ángeles volvieron al paraíso mientras que otros se quedaron en el mundo con las mujeres de las que se enamoraron convirtiéndose en humanos y Tanel está a punto de serlo también algo que los dos malvados demonios esperan aprovechar.
Un día de tantos Tanel volvía al departamento luego de pasear a Coco junto a Amanda que paseaba a Lassie y posteriormente, dejar a la joven en su casa. Una vez dentro del departamento Juan se le aparece de repente asustando a Tanel de golpe.
-¡Hola Tanel!
-¡¡BAAHH!! ¡Juan, me asustaste...!
-¿Asustarte yo? –Preguntó Juan extendiendo las manos de manera irónica.- ¿Por qué un ángel se asustaría tan...fácil?
-¡Lo soy! Pero siempre logras asustarme... -Dijo Tanel bebiendo un vaso de agua de golpe.-
Al verlo asustado y bebiendo agua de manera apresurada Juan lo miraba con cierta sospecha y mucha atención mientras alzaba y acariciaba a Coco. Tanel notó la actitud de Juan mirándolo de reojo mientras bebía del agua por lo que le pregunta al apóstol acerca de su actitud.
-¿Qué...ves, Juan?
-¡Ahh yo...! ¡Hmm nada...! ¿Por qué preguntas Tanel?
-No, no, no... Tú me estabas mirando de manera extraña Juan... ¡Dios que hambre me está dando!
-¿Hambre tú...? ¡Quien lo diría...! ¡Un ángel con hambre...!
-¿A qué se debe ese juego de palabras Juan? ¡Te conozco!
Juan miró a Tanel con indiferencia como si él supiese de lo que hablaba pero al ver que no era así, decide decirle.
-Bien Tanel, iré al grano. Te asustas muy fácil, tienes sed y tomas agua además de tener hambre. Parece que no fueras un ángel sino... ¡un mortal!
-No soy un mortal, soy un ángel... aunque no sé el por qué me da hambre o, o me asusto... pero...
-Pero nada, Tanel. Estás perdiendo tus poderes de ángel y la razón es Amanda. ¿Has intimado con ella verdad?
Tanel se sonroja cabizbajo y luego asiente. Juan pone los ojos en blanco con su mano en la frente.
-Haz de saber que al hacerlo pierdes tus poderes, eres vulnerable convirtiéndote en un mortal algo que esos esbirros del demonio esperan pues así no podrías proteger a Amanda. ¡Te matarán también!
-¡Eh yo...!
-¿Sabes por qué Marruel e Ivilin no han vuelto a atacar en estos meses?
Tanel guardó silencio viendo con miedo a Juan. El miedo era algo que él no había sentido antes pero ahora sí fue entonces que Juan le responde.
-Ellos han de saber que tú intimas o fornicas con ella por lo que están esperando a que sigas hasta ser un humano mortal. Tú eres el único que puede derrotarlos y lo sabes; y ellos lo saben también. ¿Qué harás ahora que lo sabes?
Después de un corto silencio en la estancia Tanel decide:
-¿Acaso debo volver al paraíso? –Tanel llora.- O, ¿acaso debo alejarme de ella, Juan?
-¡Hm bueno! Cualquiera de las opciones es buena. –Repuso Juan y añade.- Pero no he dicho cuál de estas debes de seguir.
-No me estás ayudando mucho, Juan.
-Lo que quiero decir es que pierdes tus poderes mientras tengas algo con la joven. Ahora bien si lo que deseas es seguir siendo un ángel, debes de renunciar a ella...
-¡No, no...no! ¡Jamás! –Interrumpió decidido el ángel.-
-O volver al paraíso y dejarle esto a otro ángel como Nuriel... esto si deseas ser ángel de nuevo.
-¡La protegeré, la protegeré siendo o no ángel!
-Aún conservas tus poderes pero en menor capacidad. Si ellos atacasen hoy, no podrías hacer mucho por ella... y lo sabes. Sólo eso es lo que te puedo decir.
Tanel cerró sus ojos llenos de lágrimas y le pide a Juan que lo deje sólo pues debe tomar una decisión algo que no le sería fácil. Entonces el apóstol coloca con cuidado a Coco en la cama y desaparece. El cachorro sabe que Tanel está triste y se le acerca para consolarlo, Tanel lo abraza.
El ángel decide hablar con la joven de que debe alejarse de ella y del porqué pero piensa hacerlo al día siguiente pues el resto del día quiere pensar en lo qué debe y cómo decírselo a Amanda por lo que apaga el celular ignorando así los mensajes de su novia. La tarde y la noche se le hicieron eternos al ángel que pensaba y pensaba de todo lo vivido con la joven además de cuánto la amaba. Le dolía saber que debía dejarla por su bien para así protegerla de Marruel e Ivilin.
Al día siguiente el ángel sale del departamento dejando ahí a Coco dirigiéndose a la casa de Amanda pero en el camino Tanel se la topa de frente pues ella iba al departamento a buscarlo.
-Tanel vida, ¿te pasa algo? ¿No viste mis mensajes? Te envié muchos pero no me diste ninguno es más, no me diste el de las buenas noches como de costumbre.
-Amanda, debemos hablar de lo nuestro. No es seguro que sigas conmigo...
-¡Ahhh qué! ¿Qué...pero, qué estás diciendo? ¿Por qué dices que...no estoy segura contigo? –Preguntó Amanda confusa.- ¡Eres un ángel...! Te amo y me amas... y aunque no lo fueras me siento segura contigo...
-Mi cielo, mi condición de ángel es por lo que no debo estar cerca de ti. Esos demonios esperan atacar y cada vez son más fuertes por lo que debo renunciar a ti y enfrentarlos...así no estarás de por medio... -Tanel llora.-
-¿"De por medio" dices? ¿Me dice que soy...u-un estorbo acaso? –Amanda le interrumpe llorando.-
-No es eso lo que dije... ¡aclaro! Debo alejarme de ti para acabarlos pues nuestra relación atrae a esos demonios...y si sigo contigo pierdo mis poderes de ángel haciendo que yo sea un humano fácil de vencer para Marruel e Ivilin.
Amanda no podía creer que todo entre ellos acabase así nada más sea cual fuera la razón por lo que le pregunta a Tanel.
-¿Y si así fuere, volverías....conmigo? Seme honesto...
-¡Ahh no! Temo que por derrotarlos siendo un ángel, me vería obligado a volver al paraíso.
-Me...siento engañada. –Negó Amanda con la cabeza llorando.- De cualquier forma te irías así nada más...
-¡No es lo que...!
Amanda dejó al ángel con la palabra en la boca pues echó a correr llorando en dirección a su casa. Tanel la dejó irse pues sabe que ella debe aceptar lo que sucede pero él estaba con su corazón dolido. Por otro lado Marruel e Ivilin se divertían con la escena a la vez que planeaban atacar antes de lo previsto.

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Un ángel enamorado.
AdventureEsta es la historia de Amanda, una joven que ha perdido la fe al grado de querer atentar contra su vida. El Señor le envió un ángel, Tanel para que con su ayuda ella volviese al camino de la luz sólo que el ángel tendrá que luchar contra las huestes...