Between the Raindrops [Newt Scamander]

#16 "Move on"

Que si fuera por mí, se muriera.

-¡Braxton! -Porpentina aulló asustada.

-¿Qué? -reclamé con lo ojos abiertos.

-Deja de considerar mi muerte.

Miré horrorizada a la bruja. Ella no podía leer la mente según tengo entendido, la única que puede es Queenie, a menos que...

-¿Podrías dejar susurrar 'muerte a Porpentina' tan siquiera?

Oh, qué cosas...

-A veces se me sale lo rencorosa, perdón -solté mirándola algo arrepentida.

-Ya miré. Aunque deberías ayudarme. Braxton, te lo ruego.

La voz de Porpentina se escuchaba demasiado preocupada, nunca había notado el temor en sus ojos. Era extraño, creo, demasiado. No era una persona que le importara enfrentar dificultades.

-Debemos ayudarla -Newt habló por primera vez sosteniendo mi brazo.

Lo miré a los ojos, había preocupación en su rostro, sabía que no podía decepcionarlo. No a él. Mirarlo tan frágil, sabiendo que la vida de aquella mujer pendía en un hilo, sería devastador fallar.

Apreté mis ojos, quién diría que terminaría salvando a aquel personaje que tanto detestaba. La historia no tenía porque alterarse si yo podía elegir lo más razonable. Diablos. Sí, le tenía un odio a aquella mujer, pero yo nunca dejaría a alguien sufrir por algo de lo cual no era su culpa.

-A la cuenta de tres, saltas -ordené indicando un espacio frente a mí.

-¡No puedo hacerlo, estás loca! -Exclamó alterada.

-¡Tienes que hacerlo si no quieres morir! -Advertí obvia.

Sin pensarlo más, entre los dos, la sostuvimos, cuando estuvo a nuestro lado, soltó un pesado agradecimiento. Se veía aliviada de salir de allí.

-¿Qué pasa? No te escucho.

-Dije, gracias Braxton -ella se acomodó su abrigo con torpeza.

Asentí de acuerdo, fue cuando comenzamos a correr. Sentía latir muy fuerte mi corazón. Recorrimos pasillos con los talones casi pisados por el personal del edificio.

Ellos querían detenernos a toda costa.

Deslumbré a lo lejos una cabellera rubia, junto con una de color negro en dirección a nosotros. Estábamos a salvo. Queenie y Jacob nos ayudarían a escapar con mayor facilidad.

No recordaba cómo es que seguía el hilo del libro tan a detalle. Tenía lagunas respecto a ciertas partes, no es como que me aprendiese el libro con cada letra y cada palabra exacta. Pero de lo que sí, era que me molestaba el hecho del existir de Tina. No sé cuándo desarrollé este sentir respecto a ella, ni por qué me sentía muy celosa cuando se trataba de Newt. Quería hacerlo feliz porque me había enamorado de él. Y él, sin darse cuenta, había sido muy lindo conmigo a pesar de las circunstancias.

Lo miré de contrabando al estar de pie en una cornisa. Tenía la vista cabizbaja, luciendo pensativo por el momento. A pesar de la situación nunca dejaba de verse tan bien, sus mejillas y nariz se encontraban sonrojadas ligeramente por el frío de la ciudad. Le daba un aspecto muy indefenso y tímido. Él me gustaba mucho. Demasiado.

-Entonces solo falta Dougal, deberíamos comenzar por rastrearlo... -arremetí con el duro silencio en el tejado.

-¿Eso qué quiere decir? -Tina me siguió con el tema.