¿Cómo Rebelarse por Amor?

capítulo 29

Mai's POV:

Llegué al lugar donde todo el mundo esperaba a que Zuko saliera para ser coronado como Señor del Fuego. Me encontré con Ryu, Ran, Kenta y Ty Lee.

- ¿Qué pasa con tu atuendo, Mai? – me dijo Ty Lee viéndome divertida.

- ¿Qué pasa con el tuyo? – le pregunté notando que estaba vestida como una Guerrera Kyoshi.

- ¡Soy oficialmente una Guerrera Kyoshi! – contestó mi amiga, abrazándome con fuerza.

- ¿Eso significa que te irás? – le pregunté ocultando mi tristeza y desilusión.

- Por un tiempo… - me contestó con una sonrisa. – Pero te escribiré, Mai.

- Seguro… - le contesté forzando una sonrisa.

Escuché como las guerreras la llamaron y ella salió corriendo con las chicas, dejándome con Ryu, Ran y Kenta. Los tres miraron extrañados mi ropa.

- ¿Se parece al atuendo que me compraron en Isla Ember? – les pregunté con sarcasmo.

- Es idéntico… - me contestó Ryu con una voz burlona.

- Había visto una pintura tuya en la oficina del alcaide hace mucho tiempo, pero incluso ahí, usabas ropa distinta. Creo que era tu uniforme de la escuela… - admitió Kenta.

- Bueno, ahora, ya saben cómo solía vestirme antes… - contesté con sarcasmo.

Miré por un momento detrás de ellos y noté como algunas damas de la corte se habían reunido y me estaban mirando, mientras susurraban cosas. Suspiré. Me había prometido que no me amargaría en este día. No en la coronación de Zuko.

- ¿Todo bien, princesa? – me preguntó Ran, notando mi transe.

- Todo bien… - mentí.

Noté como toda la gente comenzó a acomodarse y me volteé al frente para ver que Zuko ya estaba saliendo. Escuché como un Sabio del Fuego comenzó a sonar un gong. Toda la gente comenzó a aplaudir y gritar cuando lo vieron salir.

- Por favor… - dijo Zuko alzando una mano para apaciguar a la gente. – El verdadero héroe es el Avatar.

Zuko dejó que Aang pasara frente a él y la gente aplaudió con mucha más fuerza.

- El día de hoy la guerra ha terminado – siguió diciendo Zuko, provocando más gritos alegres entre la gente. – Le prometí a mi tío que restauraría el honor de la Nación del Fuego, y lo haré. El camino por recorrer es difícil. Cien años de guerra dejaron al mundo lastimado y dividido, pero con la ayuda del Avatar podemos llegar al camino correcto y comenzar una nueva era de amor y de paz…

Miré como Zuko se arrodilló y sentí como mi respiración se detuvo un segundo. Lo veía tan diferente al niño que solía perseguir en el jardín cuando tenía siete años. Habíamos crecido y no pude evitar sonreír al verlo arrodillado, dispuesto a recibir la corona y lo que ella significaba. Y de repente me pregunté si yo podría permanecer a su lado…

- Que viva el Señor del Fuego Zuko – dijo el Sabio del Fuego Mayor, mientras colocaba la corona en el cabello de Zuko.

Mi piel se erizó al escuchar eso. Oí como la gente gritaba para adular a Zuko y yo misma lo hice, pero por alguna razón me sentí ajena al momento. Lo ama, por supuesto que lo amaba y estaba orgullosa de él, pero algo dentro de mí no se sentía bien. Era como si presintiera que las cosas no iban a estar bien…

Zuko se levantó y caminó con Aang hacía el frente. Los gritos aumentaron.

- Emocional el primer discurso del Señor del Fuego, ¿no princesa? – me susurró Ryu en el oído.