Capítulo 25

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—Si deseas transformarte, no te veré...— susurre mientras cerraba los ojos.

—No, realmente deseo hacer otra cosa. — exclamo.

Estaba por abrir los ojos, pero en eso sentí como los labios cálidos de JiMin se plasmaron sobre los míos, su mano paso por mi cuello, impidiendo que realizara algún movimiento para apartarlo, tomando el control sobre aquel beso, tenue, cálido pero lleno de sentimientos encontrados.

—Ji-JiMin...— susurre, al abrir los ojos el conecto su miraba con la mía.

—Besar es como beber soju...— susurro.

—Por qué te quedas con ganas de más...— complete la frase. La cual ya me la había dicho en una ocasión anterior. —Pero, ¿Cómo?

—Mi padre me bloqueo esos recuerdos, contigo...

—Jimin...

—¿Por qué le pediste a mi padre que bloqueara esos recuerdos?

—Y-yo...— la verdad no sabia que responder. En eso sentí que mi teléfono empezó a vibrar, sentí que habia sido salvada por la campana, y también me sorprendió que tuviera señal. Lo saque de mi cartera y note que era un número de celular extraño. JiMin agarro mi muñeca.

—Respóndeme, ¿Por qué?

—Necesito contestar esto...

—Vale. — se mostró enfadado, se dio la vuelta.

—¿Alo?

—Señorita Kim.

—¿Si?

—Es su madre...

—¿Mi madre? — pregunte, JiMin volteo a verme. — ¿Qué pasa con ella?

—Esta muy mal, por favor venga...

—¿Pueden ayudarla?

—Hemos intentado, pero ha quedado muy débil, por eso solicitamos que se aproxime lo más pronto al hospital, ya que el pronostico esta en contra para su madre.

—Enseguida voy. — colgué el teléfono. —JiMin...

—Tu madre, lo se.

—¡Por favor! Ayudame a llegar a ella.

—Vamos. — este me mostro su espalda, me subi a ella y este empezó a correr, rumbo hacia su casa, en donde nos subimos al auto y JiMin empezó a conducir como un maniático. Estaba tan nerviosa, asustada, me temia lo peor. Cuando llegamos a la cueva, los dos ingresamos, yo con los tacos en mano, no habia tiempo para ir a casa y cambiarse de ropa. Al pasar la cueva y estar en el mundo de los humanos, siempre dejan un auto al otro lado. Lo abordamos, JiMin lo encendio y empezó a conducir, por suerte, no hubo policía que nos detuviera. Llegamos en la mitad de tiempo hacia el hospital. Baje corriendo del auto y subi las escaleras, no habia tiempo para esperar el ascensor. Ya estaban por ser las cinco de la mañana. Al llegar al pios en le cual se encontraba mi madre, pude ver a uno de sus doctores saliendo de su habitación y entregarle un informe a la enfermera de piso.

—¡Doctor!

—¿Señorita Kim?

—¿Cómo esta mi madre?

—Ella lucho con todo lo que pudo, pero...

—No, no...

—Lo lamento.

—¡No!

En eso alguien me jalo del brazo, al darme la vuelta me encontré con JiMin, este me abrazo fuertemente, no pude contenerme, al escuchar aquellas palabras, simplemente algo se quebró en mi interior.

—JiMin, ella...

—Lo se.

—¡No es justo!

—Mercy...

—¡No es justo! — mis ojos empezaron a llorar. —Primero papá y ahora ella...

***

Los doctores me informaron de que habia tenido un paro respiratorio, sus pulmones se habían debilitado. Ingrese a la habitación y vi su rostro por ultima vez, en eso escuche la puerta, JiMin habia ingresado.

—Tan frágil...— susurre.

—¿Qué?

—La vida de los humanos... es tan frágil, por eso JiMin. No quiero que te enamores de uno, y mucho menos de mi...— volvi a quebrarme, ante el cuerpo frio de mi madre.

Inside the Mirror 3 |BTS| 轉Où les histoires vivent. Découvrez maintenant