Seven Sensations |Bts vs Got7| •2da temporada 7Demonios•

Capítulo 27. pt final.

Oh cariño mío, si te has de quedar en algún sitio, que sea en mi cama.

Día siete...

Nervioso e impaciente. Esas dos palabras lograban describir lo que en verdad sentía. Hye había ido a mi habitación desde temprano por la mañana sin darme si quiera oportunidad de prepararme. Suspiré y entré en la ducha mientras ella arreglaba la recámara.

Al cabo de un rato, en el que ya no escuche ningún otro sonido, salí de la ducha con el torso desnudo y una toalla enredada sobre mi cintura, me seque el cabello con una toalla más pequeña y al descubrir mi vista miré a Hye parada enfrente mío.

La chica tragó saliva, puse los ojos en blanco y la guíe hasta la salida. Ese momento no era el indico, además el día recién comenzaba.

Me alisté y bajé las escaleras, cuál fue mi sorpresa cuando miré a Hye y a Yoongi conversando. Presioné mis puños y bufé. Volver a la realidad siempre era tan doloroso.

Decidí que lo mejor para mí era dejarlos solos, no estaba en condiciones para comenzar una pelea, pues les había entregado todo mi poder a los muchachos. Me harían falta por lo menos 100 años para recuperar mi fuerza original.

Suspiré y salí al jardín para poder disfrutar un poco de aíre fresco. SeokJin no había comenzado a preparar el desayuno, pese a lo tarde que era. Saque una cajetilla de cigarros de mi bolsillo, necesitaba fumar algo para por lo menos lograr tranquilizarme. Extraje un cigarrillo y lo encendí.

— Solamente falta un día ¿No es así? — Me giré al escuchar aquella voz. Sonreí.

— ¿Qué mierda haces aquí? — Pregunté. — Creí que tenías trabajo.

— Dijiste que podíamos relajarnos, los arcángeles aún no comienzan. — HwaSa se encogió de hombros y sonrió. La chica estiró la mano y me arrebato el cigarro para llevarlo a su boca e inhalar. — Quiero que todo esto termine para poder estar contigo.

Negué con la cabeza y le quité mi cigarrillo.

— No sabes lo que pides.

— Pero sí lo que quiero. — HyeJin me miró a los ojos y sonrió taimada. — No puedo cambiar lo que siento NamJoon.

— Yo tampoco. — Sentencie. HyeJin me miró inquisitiva, le sonreí y le entregué el cigarrillo.

Al no tener nada más que decir, decidí que lo mejor era entrar en la casa y buscar algo con que distraerme.

Me recargue en la puerta, me sentía realmente débil.

— ¡Hey tú! ¿Estás bien? —SeokJin se acercó a mí preocupado. Dejó un par de bolsas de compras en el piso y tocó mi frente con su mano para comprobar mi temperatura. — Man, no te ves nada bien. — Musitó.

— No estoy nada bien, hyung. — Dije.

Alarmado, SeokJin tomó mi brazo y me guío hasta el sofá de la sala para que pudiera sentarme.

— Será mejor que te quedes aquí, por lo menos hasta que te sientas mejor.

Asentí.

— Jin... — Belcebú se giró para verme. — No le digas a los demás.

Jin dudó por algunos segundos y suspiró.

— Si te pones peor, eventualmente tendré que hacerlo, NamJoon.

Sonreí y asentí dándome por vencido. Sabía que SeokJin conocía cada una de mis debilidades y aunque eso representaba un gran peligro para mí, que Jin estuviera al tanto, lograba mantenerme un poco más tranquilo.