Cap. 29 "Intento de homicidio"

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Si algo tiene la universidad, es que los entrenamientos son el triple de arduos que en el instituto. Pasamos casi días enteros en el gimnasio de la mención correspondiente y debido a esto solo se debe escoger un solo deporte como única opción en cada semestre. Mis entrenadores, que son dos, la entrenadora Montenegro y el entrenador Collins son personas bastante estrictas, tienen sus buenos momentos pero cuando se trata de ponerle empeño a los ejercicios dan todo de sí, por lo que los atletas debemos de dar el triple si no queremos ser reñidos severamente.

― ¡Vamos, Bolton, no flaquees! ― exclamó la entrenadora ― Concentración. Si sigues así la pelota va a destrozar tu tabique un día de estos por andar de distraída. ― Mi mente jugándome una mala pasada por...ya perdí la cuenta de las veces que esta ha estado conspirando en mi contra.

― Si, señora. ― Y sí, el lenguaje formal debe estar presente siempre.

― Sácate a Bane de la cabeza. ― dijo esto en voz baja, solo para dirigirse a mí ― ¿Creíste que no lo sabía? A veces lo veo con cara de idiota sonriente mirándote a través del cristal del gimnasio.

― ¿En serio? ―

― ¿En serio qué? ¿Qué si tiene cara de idiota o que siempre te mira?

― La cara de idiota es verídico pero no sabía que andaba por allí...-

― Ah...adolescentes enamorados. ― añadió interrumpiéndome. ― Basta de palabrería, Bolton ― ¿Quién la entiende? Ella fue la que buscó la conversación ¿Pretendía que diciéndome aquello iba a quedarme sin decir nada y pasarlo por alto? ¡Joder, si ahora mismo estoy gritando internamente! Ese tipo de gestos son las pequeñas cosas que hacen que me enamore estúpidamente de él.

― Atletas, buenos días. ― Alguien, que no era el entrenador Collins hizo acto de presencia en el gimnasio, cuando giré a ver, inmediatamente le reconocí ― Soy Ansel Fellore, líder del equipo masculino de voleibol, vengo a informarles que el entrenador Collins se ausentará varios días por razones de salud. Debido a esto tengo el honor de hacerle la suplencia y cumplir con el pedido del entrenador. ― informó con una sonrisa de oreja a oreja plasmada en su rostro.

― ¿Disculpa? ― cuestionó la lideresa del equipo femenino ― ¿No se supone que cuando uno de los entrenadores se ausenta la líder o el lideresa de la mención en la categoría correspondiente debería de cumplir con la suplencia? En ese caso debería ser yo como lideresa quien entrene a las atletas hoy y no tú. ¿Por qué ni siquiera fui informada de la ausencia del coach? Además, está la entrenadora Montenegro, no capto nada de es...-

― Porque él, en persona me lo pidió a mí. ― interrumpió ― Ahora si me permites, debo entrenar a las atletas, estamos perdiendo tiempo en esta conversación que no nos llevará a ningún lado. ― luego de varios segundos de duda, la lideresa comenzó a ajustar la malla de la cancha y los equipos enseguida comenzaron a formarse. ― Eh...Bolton ― Fellore llamó mi atención al pronunciar mi apellido

― ¿Si?...señor... ― era incomodo llamarle "señor" cuando ambos tenemos la misma edad, sin embargo, así son las cosas aquí.

― S-será un placer trabajar contigo ― añadió tartamudeando ― En realidad mentí, fui yo quien le pidió al entrenador Collins que me dejara llevar la suplencia a mí, no podía perder ésta oportunidad de entrenar contigo. ― sonrió mientras tomaba mis ambas manos. Por instinto giré mi mirada hacia los cristales del gimnasio, donde vi a Holton mirándome con el ceño fruncido alejándose enseguida dando pisoteadas. Inmediatamente me alejé de Fellore luego de sonreírle en forma de agradecimiento que terminó siendo la situación más incómoda de todas.

¿Una Chica? (finalizada)Where stories live. Discover now