Unstoppable (Supercorp & Scarletwidow)

Extra

Themyscira..

Lexa Pov.

Antiope estaba a mi lado, ambas miramos a Lena y Natasha que tenían trece años, ambas mirando como entrenaban Las Amazonas.

-Ambas tienen que entrenar, ya es tiempo-. Dijo Antiope y yo asentí.

Nuestra Reyna no quería hacer eso, después de lo que pasó con Diana y el que ella se fuera, no quería lo mismo para Lena.

Ni tampoco para Natasha ya que era otra nieta para ella, Mera no estaba ni de acuerdo ni en contra solo quería que su hija viviera tranquila.

-Las entrenaras tu... Yo me ocuparé de lo demás-. Dijo Antiope antes de irse a mirar a las demas Amazonas.

Mire hacia arriba donde estaban Lena y Natasha, Natasha hacia movimientos con su manos mientras Lena se reía, ambas sonrieron y después se marcharon.

La tarde se fue rápidamente, las dos seguían haciendo travesuras por todos lados, al final de la tarde espere donde Antiope me dijo.

Minutos después llegaron Lena y Natasha cubiertas para que nadie las viera.

-Mi tía dijo que te encontraríamos aquí-. Dijo Lena quitándose la capucha.

-Asi es, vamos entrenar-. Dije girando la lanza en mi mano.

-¡Genial!-. Dijo Natasha entusiasmada.

-Mi abuela no quiere esto-. Dijo Lena dando un paso atrás.

-Sera un secreto Lena, como los demás-. Dijo Natasha con una sonrisa.

-¿Qué secretos?-. Dije alzando una ceja y cruzandome de brazos.

-Oh... Nada-. Dijo inocentemente.

-Ahora van agolpearme-. Dije y en ese instante ocurrieron dos cosas a la vez.

La primera fue que Lena dijo que no lo haría y la segunda fue cuando sentí un puñetazo en el abdomen doblandome por la fuerza.

-¡Natasha!-. Gritó Lena mientras yo me enderezaba de nuevo.

-¿Qué? Ella dijo que la golpeara-. Dijo Natasha alzando los hombros.

Mientras estaban distraídas, golpee a Natasha haciendo que cayera.

-Si empiezas una pelea no puedes dejarla, tampoco distraerte-. Dije apuntándole con el dedo.

-Y tu Lena, tienes que aprender a defenderte, no sabemos que pueda pasar el día de mañana, si nos invaden y nadie puede cuidar de ti, tienes que hacerlo por ti misma-. Dije y fue ahí cuando ella asintió con la cabeza

Comencé a entrenarlas, ambas tenían reflejos rápidos, Natasha golpeaba con fuerza mientras Lena aún se contenía.

Era igual que Diana cuando empezó, eso fue lo que me dijo Antiope, ambas usaban la lanza y golpeaban sin parar.

Poco a poco se desenvolvieron con los siguientes cuatro días, ambas peleaban entre ellas.

Miraba su pelea detenidamente, Lena lanzo un golpe a Natasha que esquivo rápidamente.

Natasha giro dándole una patada en la espalda de Lena, tuve que decirle que no se distrajera.

Me alegraba de que aprendieran rápido, Clarke sabía lo que hacía con las chicas y decía que estaba bien.

-¿Qué es lo que está pasando?-. Dijo una voz detrás de mi.

En ese momento Lena le dio un puñetazo que Natasha no esquivo por ver a Diana, salió volando y Lena miro inocente a Diana.

-¿Lexa?-. Dijo Diana y yo incline mi cabeza.

-Princesa, solo estaba entrenandolas porque no sabemos lo que puede pasar, necesitan defenderse-. Dije y Diana suspiro.

Natasha se quejó en el suelo para después ponerse a lado de Lena que rápidamente tomo su rostro preguntando si estaba bien.

-Tienes razón Lexa, hablaré con mi madre acerca de esto para que no sea a escondidas, ahora vamanos-. Dijo Diana mirando a ambas.

Natasha y Lena comenzaron a caminar hacia Diana, mire como Diana las echo a sus hombro mientras ambas se quejaban.

Agitaron sus manos despidiéndose mientras se iban.

Negué con la cabeza, al siguente día a Clarke y a mi nos tocará cuidarlas.

Aunque Natasha apenas llegaría hoy y Lena ya estaba esperándola en la isla.

-Son muy apegadas-. Dijo Clarke y yo asentí.

Segundos después salió Mera a lado de su hija, Lena y Natasha corrieron para abrazarse.

Terminaron rodando por la arena, ambas riendo.

Mera se acercó a nosotras, asentimos con la cabeza ya que le tenemos respeto.

-No podré quedarme, Arthur y yo tenemos asuntos que atender, cuidenla por favor, el la noche vendré por ella-. Dijo Mera para despues voltearse y desaparecer.

Mire hacia arriba donde estaban Hipólita y Diana en un caballo viendo a Lena y Natasha.

-Oh... No... No-. Dije al ver la mirada que Natasha y Lena se daban.

Ambas salieron corriendo, Clarke no pudo soportarlo y comenzó a reír, no es nada gracioso cuando esas niñas escapaban.

-Vamos-. Dije para comenzar a caminar.

-¡Lexa ten cuidado!-. Gritó Diana con una sonrisa burlona.

Solo asentí para caminar, siempre pasaba algo cuando hacían eso.

De niñas me habían aventado una rama por que estaban arriba de los árboles.

Y eso solo era una vez, porque las demás veces eran peores, a todas las amazonas les tocó una travesura.

A Clarke la habían amarrado y no se como era eso posible, Waverly quedó encerrada en la torre por ellas dos.

Camine hasta llegar a los árboles que rodeaban la isla, Clarke iba a mi lado, ambas alertas para saber dónde estaban.

-¡Te tengo!-. Gritó Natasha saltano encima de mi.

Actúe rápido para que cayera en el suelo, Lena salio de la nada aventando una rama mientras reían y salían corriendo.

-Aun no entiendo porqué son tan traviesas-. Dije arrugando la nariz.

-Natasha lo es más, ya me imagino lo que ha de pasar en Atlántida, ella sabotea a Lena, porque cuando Natasha no está, Lena está más tranquila-. Dijo Clarke y si... Tenía toda la razón.

Esa pequeña pelirroja es la culpable de todo, el dia paso rápido.

Clarke y yo habíamos salido sucias de aquel lugar pero arrastrando a Natasha y Lena que reían.

Tuvieron su entrenamiento con Antiope, después de eso se la pasaron con Diana y Hipolita.

Igual a ellas le hacían travesuras, pero siempre sacando una sonrisa a todas.

Ambas corrían por todos lados, las energías jamás se les acababa.

Al final de la noche ambas quedaron dormidas a la mitad de la calle del mercado.

Diana alzó a Lena en sus brazos que murmuraba algo pero se abrazo a su madre.

Natasha fue alzada por Hipólita y nos acercamos al mar donde salio Mera sonriendo viendo a su hija.

La tomo en brazos, Natasha murmuró un adiós en sus sueños, ambas se marcharon.

-Es hora de descansar... Se lo merecen-. Dijo Hipólita viéndonos.

Clarke y yo nos marchamos, ambas estábamos agotadas de perseguir a las dos, estábamos llenas de tierra ya que nos habían arrojado arena minutos antes de desaparecer y encontrarlas tiradas en el suelo durmiendo.