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No. No era cierto.

Aquello no podía ser verdad.

Esos fragmentos no podían pertenecerle a...

O eso era lo que quería creer. Pero no era tonta.

Al ser una gema técnica, encargada de cada Kindergarten como cada Peridot, ella reconocía la composición de las piedras preciosas, sus minerales.

Además, aquellos colores le delataban.

Negó, negó lo más lento que su estado de shock se lo permitía.

Su cuerpo había comenzado a temblar, especialmente sus apéndices para tocar, los cuales convertía en puños llevando consigo arena, mientras observaba expectante aquellos fragmentos de lo que alguna vez fue la mejor gema que pudo haber conocido.

Debía avisarle al resto. Probablemente estuvieran cercano a Amethyst.

Dubitativa, temblorosa y con unas esperanzas relativamente bajas siguió cavando alrededor del pozo hecho con anterioridad.

Nuevamente se había arrepentido.

























Trozos de una gema ovalada, de tonalidad blanquecina.












Más fragmentos. Aparentemente de dos gemas.
Varios eran de colores rojizos, mientras otros tenían tonos azulinos.












No lo entendía: ¿qué les había ocurrido?








¿Y que era aquella sensación de ardor que invadía sus esferas de visión?

Where? ┋ Steven UniverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora