Love Me Like You

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Disclaimer: La historia es de mi pertenencia, en ella sólo utilizo sin ningún fin de lucro, a los personajes de Naruto, cuyo creador es Masashi Kishimoto. Está prohibido re-suban esta o cualquier otra de mis historias, o adaptarlas. La canción pertenece a Little Mix.

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—¿Eres estúpida? —Ino estaba molesta— ¿Cómo puedes ser tan idiota?

No eran los insultos usuales, estas descripciones eran entonadas con verdadero desprecio, no la usual burla de Ino. Sakura sólo se encogió en hombros y casi se disculpa. Casi.

—¡No supe que más hacer! —trató de defenderse, algo desesperada— Todo fue tan rápido y Dios, ese beso me derritió las neuronas, sólo- fue tan... aaah, y de pronto abro mis ojos y es real, ¡me acobardé! Mi boca habló antes que nada, fue como por reflejo.

—Claro, tanto tiempo negando y-

—Y luego Sasuke no me dijo nada. Él sólo me miraba como si- no sé,... como si hubiera cometido un error, y- yo sólo quise proteger mi corazón, nuestra amistad. ¿Sabes cuán incómodo sería si yo le hubiera dicho lo que siento y él me dijera "mejor no"? ¡Moriría!

—¿Así de mal?

—¡Más!

Ino se veía dividía entre darle unas palmadas de empatía o arrastrarla del cabello y llevarla hasta Sasuke y que dejen este insulso y tonto drama.

—Para estar entre los más listos de la escuela, como chica eres bastante estúpida.

—¡Hey!

Ino sólo suspiró, rindiéndose con esta boba chica. ¿Qué debería hacer para ayudarle?— ¿Qué planeas hacer?

—Nada, es-¡ouch!

A Ino también le dolía su mano por el golpe, pero no dejaría caer.

—Te estás comportando como una babosa sin remedio. ¡Has algo!

Sakura mordió su labio. Es que, si hacía algo, lo arruinaría aún más. —¡No puedo!- ¡No ahora! —agregó antes de que Ino le volviera a golpear— Es que, tengo muchas cosas de las que preocuparme, y lo de Sasuke es... es-es algo que quiero hacer bien.

Porque Sakura podría ser fantasiosa, caprichosa, y en cuanto a Sasuke, una completa boba, pero él era importante. Él era más. Ella quería algo bien con esta persona a la que se había rendido en llamar amigo. Quería algo sencillo y lindo, en su mente el plan era simple; ser novios por cinco años, casarse, luego de un tiempo viajando, tener hijos. Tres para ser exactos, con varias mascotas y una casa grande.

Aunque primero debía cerciorase de que él sentía lo mismo que ella.

Pero esto era tan estúpidamente complicado y ella era Sakura, la dramática cuyo cerebro se derretía ante la imagen de Sasuke y no era capaz de plantarse frente al chico y decirle que le amaba, no sin el temor de ser rechazada. Y el beso... el beso fue tan, tan fantástico, todo lo que siempre quiso. Pero en este momento sus emociones estaban todas revueltas. No podía hacerle frente a Sasuke si no había resuelto su amistad con Naruto.

Y era aquí el por qué no puede enfrentar a Sasuke. Aun.

Para tener la perfecta y siempre deseada imagen de amar al pelinegro, tener a su mejor amigo, y ahora a una amiga. Pero había alguien quien estaba obstruyendo eso.

—No hasta que arregle mi situación con Naruto.

A Ino eso le sacó de tema.

—De qué-

—Ino, ayúdame con lo que te pedí.

Con decisión, una mirada libre de juego o inseguridad, fija y determinada, Sakura le solicitó a Ino. Debía asegurase de que Naruto sería su amigo para siempre, sólo de ella. Luego de eso...

Luego de eso se le declararía a Sasuke.

***

A decir verdad, Ino no estaba segura de eso. No importaba que idea Sakura tuviera de ella o que tan estereotipada su imagen fuera -rubia, popular y guapa- pero Ino no era la bruja desalmada que Sakura pensaba, ella era bastante agradable, o al menos no gozaba de hacer sufrir a los demás. O bien, no todo el tiempo. Solo a Sakura, porque era divertido.

Y trató de decírselo, muchas veces, pero la pelirrosa ahora estaba empeñada a hacer su voluntad. Ino pensó en negarse, vaya que lo hizo, pero...

Suspiró.

Pero Sakura estaba vulnerable, creyendo que su posición en la vida de su amigo Naruto estaba en juego, creyendo (estúpidamente) que Sasuke no correspondía sus sentimientos, y si la rubia ahora se negaba sería un golpe para la chica.

Frente de marquesina ya se siente sola y traicionada. Así que, muy a su pesar, Ino accedió. Pero sabía que no iba a resultar bien, creía firmemente; el karma is a bitch.

—¡Hey, cuidado!

Y justo en cuanto alguien gritó eso, Ino miró hacia la cancha y vio como la pelirrosa miraba a quien gritaba y luego a la dirección donde el balón iba. Ino suponía que Sakura seguía con sus conflictos internos y por eso no prestaba la atención necesaria y el balón le pegó justo en el hombro.

Hacía un rato que su propia practica había terminado, y aun vestida en su uniforme de porrista, ella estaba contemplando la acción próximamente a tomar de su amiga. Desde las gradas, Ino esperaba a dicha chica, quien practicaba con el equipo de vóleibol. Tenten fue la primera en acercarse a Sakura y ayudarle a pararse.

—¿Te has lastimado?

—No, estoy bien.

—¿Segura? Luces algo...

—No es nada.

Ino apoyó su barbilla en la palma de su mano, observando a su amiga y Tenten. Tal vez si le pedía ayuda a la castaña, ambas podrían convencerla; parecía que Sakura había desarrollado algún tipo de respeto o admiración hacia Tenten, y aun con el poco tiempo de amistad, Ino sabía que eso era algo raro de ver en ella.

Luego de otra ronda de práctica, y una vez que les dieron pase para retirarse, mientras Sakura iba a asearse, Ino se acercó a Tenten.

***

—¡Sasuke-teme! —el chico en cuestión no tuvo tiempo de girar hacia donde le llamaban, porque tal persona le golpeó, aventándose contra él. Sasuke no reprimió el gruñido e irritación.

—Quítate de encima —porque además de la molestia del golpe, su humor estaba de lo peor.

—Uy, alguien está en su días especiales.

—Vete al diablo.

—¡Eres cruel!

Y a pesar de eso, Naruto pasó su brazo sobre el hombro de su amigo, ignorando la molestia en la cara del otro y a sus intentos de zafarse de su agarre.

—Tengo la solución a tu predicamento.

Sasuke le miró con duda, sorprendido que Naruto usara la palabra "predicamento" y aun así, su comentario sarcástico no salió de su mente, seguía serio.

—Ahora. Puesto de ramen.

Sasuke giró los ojos, poco tolerante. —¿Qué te hace pensar que iré contigo a comer?

La sonrisa de Naruto se ensanchó, su agarre más fuerte, y sus ojos traviesos.

—Porque Sakura-chan estará ahí.