Louder than lions » ziall

8.

Niall no entendía. No entendía por qué Zayn lo empujó al auto y se dio la vuelta, sin mirar hacia atrás para despedirse. No entendía nada de esto.

El conductor del auto se estaba volviendo poco a poco por los ruidosos gemidos de Niall junto a sus lloriqueos, dejando escapar un gemido seguido de otro y otro.

— Vamos chico, te voy a llevar a una casa muy bonita, ¿De acuerdo? Cálmate, todo estará bien.

Niall no respondió, porque no quería hablar con nadie en en ese momento. Hablar con él no era muy fácil, y si no es Zayn, entonces sentía como si no tuviera que responderle a nadie en lo absoluto.

Circularon durante unos treinta minutos, llegando finalmente a un pequeño suburbio muy lindo con casas grandes y hermosos árboles. El llanto de Niall no se detuvo, pero asomó la cabeza y miró por la ventana, admirando la hermosa vista. Nunca había visto un lugar como este antes. Las casas eran casi como castillos, pero no estaban del todo bien. Esas necesitaban un poco más para ser como en los sueños de Niall. Pensar en los castillos solo le hizo pensar en Zayn sin embargo, y causó que llorara aún más fuerte.

— Por favor chico— el conductor dijo, —Estamos cerca. Por favor deja de llorar.

Pero Niall no podía hacer eso.

Finalmente el auto se detuvo , y el conductor salió, agarrando el equipaje de Niall de la parte trasera y volvió a abrir la puerta del niño. Niall no se movió. Sólo miró al conductor con una expresión confusa en su rostro.

— ¿Zayn?— preguntó Niall.

— Lo siento— dijo el hombre —Él no va a venir.

— P-Pero...— Niall sollozó de nuevo, y estuvo a punto de gritar, de no ser por una mujer muy agradable que salió de la casa en la que estaban aparcados delante. Niall miró sus amables ojos marrones y las líneas de expresión alrededor de la boca, y decidió que ella no se veía como una mala persona.

— ¡Hola Niall!— sonrió, llegando cuando el niño se puso de pie. Niall dio un paso atrás, un poco asustado por su actitud tan abierta. Sin embargo, el estado de ánimo de la mujer  cambió cuando vio las lágrimas de Niall, —Oh, cariño, está bien— susurró, tratando de llegar hacia adelante y rodear al niño en un abrazo. Niall se alejó sin embargo. No estaba acostumbrado a ser tocado, a menos que fuera Zayn. La única persona que no fue Zayn y que alguna vez realmente lo tocó fue su 'padre' y sabemos cómo terminó, —Aquí, cariño, vamos adentro— dijo la mujer, agarrando las maletas de Niall y caminando por el sendero principal.

Niall gimió, descubriendo que su cuerpo temblaba, mientras seguía a la noble mujer hasta la casa.

—  Soy la señora Payne—  ella dijo, sonriendo débilmente a Niall. Niall asintió y se mordió el labio, arrastrando los pies un poco., — Y esta será tú casa por un tiempo.

Cuando se abrió la puerta Niall entró tímidamente al interior, mirando a su alrededor y tomando algunas respiraciones temblorosas.

—  ¿Te gusta?— Preguntó la señora Payne.

—  ¿Dónde está Zayn?— dijo Niall, limpiándose las mejillas, donde las lágrimas se habían secado.

—  ¿Quien es Zayn?—  preguntó ella.

—  Zayn...— Niall murmuró, sus ojos azules llorosos mirando hacia arriba a la señora Payne.

La señora Payne inclinó la cabeza hacia los lados buscando a su nuevo hijo adoptivo. Ella siempre había sido una persona que ayudaba a los niños con necesidades especiales, pero nunca había conocido a un chico que se le pareciera a Niall. Él era diferente. Fue capaz de comunicarse y hablar, pero al mismo tiempo no estaba a su nivel de edad. Era muy obvio para la señora Payne que el niño era muy sensible. Tal vez tendría una especie de autismo.