Capítulo 50

4.9K 357 4
                                    

Luego de disfrutar la cena (La cual era pizza, me encanta la pizza y Alex lo sabe), salimos a ver las estrellas y luego de un rato me quede profundamente dormida.

Abro los ojos lentamente al sentir unos pequeños besos en los labios.
Creo que es obvio que no tengo que decir quien me está dando los besos.

- Buenos días, hermosa. - sonrío.

Aún me sigo preguntando:
¿Cómo fue que terminé enamorada del chico el cual odiaba? Bueno, no odiar, digamos que mi primera impresión no fue muy buena.
Pero ¿Por qué soñe con él?... ¿Será que él habrá soñado conmigo?
Algún día tendré que hablar de esto con Alex. Por alguna razón soñé precisamente con él, ¿no?

- Buenos días, cariño. - Me abraza por la cintura y coloco mi cabeza sobre su pecho en donde mi pulgar hace pequeños círculos.

- Tenemos que regresar. - dice acariciando mi mejilla.

Hago puchero... ¡No quiero regresar! ¡Quiero quedarme aquí por mucho tiempo!

Mi teléfono emite un sonido avisándome algún recordatorio. Miro sobre qué se trata y abro demasiado los ojos... Casi saliéndose de su órbita.

¡¿Cómo es que pude haberme olvidado de esto?! ¡¡Es el cumpleaños de Alex!!

Ok, Camille, piensa.

¿Qué puedo hacer? Si lo saludo ahora pensará que mi teléfono me lo recordó y no quiero ser una mala novia... Aunque ya me siento así por no recordar su cumpleaños... Y pasé toda la noche con él.

Ok.
Ya sé que es lo que haré.

- ¡No! Antes quiero ir a otro lugar. - apago mi teléfono. - Pero primero... ¡A desayunar! - me levanto de la cama.

- ¿Tú harás el desayuno? - Volteo y lo miro sonriendo.

- Sí. - asiento con la cabeza. - ¿Qué tiene de malo? - frunzo el ceño, mientras me cruzo de brazos.

- Nada, nada.

- Bueno, iré a la cocina.

- Te acompaño. - se levanta de la cama. - Quiero ver que le pones al desayuno. - murmura.

Entrecierro los ojos. - ¡Te escuché!... Y te aseguro que si me enseñas a cocinar te ganaré en la cocina. - digo señalándolo con mi dedo.

- ¿En serio? - asiento. - Entonces a la cocina. - Ambos caminamos hacia la cocina. - Muy bien, querida alumna, empecemos con esto.

- Está bien, querido profesor. - Me siento sobre la isla que está en medio de la cocina. - Espera... - me mira. - No me vayas a enseñar a hacer tostadas con mermelada. - lo señalo amenazándolo. - Eso ya lo sé hacer.

- Entonces... - mira toda la cocina. - ¿Qué te enseño?

- ¡¿En serio me ibas a enseñar a hacer tostadas con mermelada?! - voltea a mirarme y sonríe. Suspiro. - Ok, ok... ¿Qué te parece si me enseñas a hacer panqueques?

- No es mala idea. - Saca su teléfono. - Necesitamos: 2 huevos, 1 taza de Harina, 1 taza de Leche, 1 cucharadita de aceite, 1 pizca de sal y azúcar.

- ¿Me lo repites? - digo colocando los ingredientes sobre la encimera, mientras los busco.

- Esto va a llevar tiempo.

***~~***

- Eso fue agotador. - digo sentándome en el asiento del conductor del auto de Alex.

- ¿En serio? Cam, hice todo yo.

- Sí, lo sé. - lo miro, mientras sube. - Por eso fue agotador comerlos. - sonrío. - En algo debía ayudarte. - me mira entrecerrando los ojos.

¿Quién es Alex? | (Saga Sueños) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora