Nuestra Fugitiva #1 (Terminada)

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Quiero editar la historia porque tiene unas cuántas faltas pero no quiero perder mucho tiempo leyendo porque tengo otras historias que actualizar así que les agradecería que cuando encuentren una falta o incoherencia la comenten en el párrafo que está. Se me haría mucho más fácil porque sus comentarios me aparecen en las notificaciones y así voy directamente a donde está la falta y la corrijo

Gracias 😘

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Dos días habían pasado y Lía prácticamente era una persona en estado vegetativo, no podía hacer nada...borren eso...no la dejaban hacer nada

El médico recomendó que se cuidara para evitar un aborto espontáneo. Claramente ellos se preocuparon demasiado cuando se dieron cuenta de que el supuesto periodo de ella semanas atrás había sido en realidad una pérdida. Le comentaron eso al doctor y por esa razón ahora todos estaban pendientes de ella y de que no se moviera. Apenas y la dejaban ir al baño, y encima la bañaban ellos

Se removió un poco en la cama y abrió los ojos perezosa. Frente a ella sentado tranquilamente con una sonrisa leve en la cara estaba Matt, los ojos azules más lindos que había visto en su vida. Lo rodeaba una sensación de paz y felicidad, en definitiva su vida junto a esos hombres apenas comenzaba, y ella ya podía ver que sería muy feliz. Notó una sonrisa perversa en los labios de Matt y un hormigueo se sintió en lo más profundo de su vientre

- Pero que caliente se ve mi mujer durmiendo- murmuró, sus ojos oscureciéndose bastante y su pulgar acariciando su mandíbula bronceada

- Pero que caliente se ve mi hombre siempre- devolvió ella con una ceja levantada en señal de un silencioso desafío, "que piensas hacer"

Los ojos de Matt centellaron hacia ella en señal de deseo, se levantó de la silla y caminó hacia la cama en donde estaba Lía recostada. En el camino se quitó la camisa blanca que traía puesta, su abdomen muy bien definido y bronceado casi hizo babear a Lía

Sus fuertes y duros brazos la rodearon en cuanto se acostó junto a ella, su cara escondida en el cuello pálido oliendo su cabello colorido.

- Manzanas- murmuró él- siempre hueles a manzanas, no sabes lo que me hacen las manzanas ahora. No puedo verlas ni olerlas porque inmediatamente me recuerda a tí, y sabes muy bien lo que provocas en mí cariño- su lengua caliente se paseó por el cuello hasta el lóbulo de la oreja el cual chupó arrancándole un gemido a su mujer

- Estoy muy mojada- gimió en su oído logrando que todo el cuerpo duro y bronceado encima de ella, se tensara

- Tengo miedo- susurró. Lía frunció el ceño confundida, lo miró a los ojos, un poco más oscuros que su color natural. Él entendió y continuó hablando- no quiero hacerte...hacerles daño- se corrigió mirando hacia abajo, entre ellos, su vientre.

Lía sonrió con ternura, ese hombre sería muy frío a veces pero con ella, con ella era todo un osito de peluche, un osito blando por dentro pero muy duro por fuera...y si que estaba duro

- No lo harás amor. No quiero que me traten como si fuera de cristal. Quiero que me follen, que me hagan el amor. No tienes idea lo que hace el embarazo conmigo, estoy caliente todo el tiempo y me mojo con sólo verlos- Matt sonrió orgulloso del efecto que tenían sobre ella- deberían estar follándome contentos de que haya decidido olvidar el castigo de no sexo por tres semanas