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Quiero editar la historia porque tiene unas cuántas faltas pero no quiero perder mucho tiempo leyendo porque tengo otras historias que actualizar así que les agradecería que cuando encuentren una falta o incoherencia la comenten en el párrafo que está. Se me haría mucho más fácil porque sus comentarios me aparecen en las notificaciones y así voy directamente a donde está la falta y la corrijo

Gracias 😘

***

Hoy era el día, hoy iba a conocer a la familia de sus hombres. Hoy se decidía si moría o vivía....bueno no tan así pero Lía estaba realmente nerviosa.

- ¡Mierda!- gritó mirándose al espejo, sus caderas estaban más anchas, no era notable a simple vista pero ella lo sabía porque el pantalón que hacía unas semanas le quedaba perfecto ahora le apretaba. Y sus pechos estaban más grandes, en definitiva debía dar uso al gimnasio y no solo quedarse allí a contemplar a sus hombres aunque odiaba hacer ejercicio, y debía dejar de cocinar tantas cosas dulces, últimamente tenía una necesidad preocupante por comer chocolate

- ¿Amor?- Michael entró preocupado a la habitación y encontró a su mujer enojada, con las manos en la cintura, el ceño fruncido y en ropa interior frente al espejo. Era caliente, su polla dio un brinco ante semejante vista de sus caderas y sus pechos apretados por el sujetador

Caminó hacia ella y la abrazó por la cintura llevando, en el proceso, las pequeñas manos de Lía junto con las suyas hacia delante de ella. Apoyó su mentón en su hombro derecho y besó su mejilla. A ella se le cristalizaron los ojos ante aquello, pero no era por el gesto tierno o talvez sí no estaba segura, pero quería llorar, tenía unas ganas inmensas de pelear con alguien y llorar luego

- ¿Que pasa mi vida?- preguntó Michael preocupado

- Estoy gorda- dijo con un puchero demasiado tierno, él soltó una pequeña carcajada- voy a ponerme a dieta

- ¿Tú estás loca? Estás perfecta así ¿Tienes idea de los estragos que causas en nuestras pollas cada vez que te vemos?- restregó su nariz en su cabello aspirando el aroma a manzanas que emanaba de ella

- ¿Y tú me vas a decir que no te has dado cuenta de que mis caderas están más gordas?- exclamó histérica

- Yo no lo llamaría gordas- ella le lanzó una mirada fulminante a través del espejo- amor escucha- la pegó más contra él- hasta alrededor de los veinticinco tu cuerpo va a seguir creciendo, cambiando y desarrollándose

- Yo creí que no iba a crecer más- claramente ella se refería de ancho pero entonces se dió cuenta- ¿Eso quiere decir que todavía tengo esperanzas y puedo crecer diez centímetros más?- él soltó una carcajada

- No creo que diez centímetros pero talvez algunos pocos- besó su mejilla otra vez

- Oh, igual voy a hacer dieta

- Amor eres perfecta, pero si quieres puedes hacer ejercicio con nosotros- murmuró en su cuello

- Entonces si estoy gorda, me estás diciendo gorda- Lía intentó zafarse de su agarre pero él no se lo permitió- suéltame Michael

- No quiero manzanita- se estaba divirtiendo con aquello, pero debía prestar atención ya que no quería que ella se obsesionara con su figura y se pusiera a hacer dietas extremas. Lia era perfecta y lo tres estaban encantados con el cuerpo de su mujer

Nuestra Fugitiva #1 (Terminada)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant