Y... ¿Tú quién eres?

Capítulo 5

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Pasaron casi dos meses desde el accidente con Morinaga y me daba cuenta que a pesar de que ahora eramos como dos amigos verdaderos, algo me faltaba.

Un día llegó más feliz que de costumbre.

Souichi:- Oi. ¿Qué ocurre contigo?.

Tetsuhiro:-Emocionado- Al fin recuerdo la mayoría de las cosas, Sempai.

Souichi:-Nervioso- ¿De verdad?.

Tetsuhiro:-Radiante- Claro. Ya recuerdo que los dos somos mejores amigos y soy su kohai en la Universidad. Además, recuerdo todas las veces en las que me ha apoyado y también recuerdo a su familia.

Souichi:-Desilusionado- ¿Sólo eso?.

Tetsuhiro:-Confundido- Pues sí, ¿hay algo más que deba saber?.

Souichi:-Disimulando su frustración- No. Eso es prácticamente todo.

Tetsuhiro:-Sonríe- Bien, regresaré a la Universidad a partir de mañana y lo ayudaré a terminar con los experimentos.

Souichi:- Está bien...

A pesar de lo que dijo no pude evitar sentirme un poco desanimado, no sé exactamente por qué.

Decidí ir con el médico que nos había atendido la otra vez para que me dijera el por qué no recordaba ciertas cosas.

Doctor:-Sentado enfrente de su escritorio- ¿Qué lo trae por aquí?, ¿Morinaga-san ha tenido algún problema?.

Souichi:-Incómodo- Am, no. Simplemente quería preguntarle por qué él ha recordado casi todo pero sigue sin recordar otras cosas.

Doctor:-Pensativo- Puede ser porque todavía necesita un poco de tiempo para recordar o inconscientemente está tratando de bloquear algún recuerdo doloroso, pueden ser varios factores. ¿Son muy importantes aquéllas memorias?.

Souichi:- ... No...

Después de eso me retiré del consultorio y empecé a vagar un poco por las calles.

Estaba analizando las cosas, ¿por qué me afectaba tanto que Morinaga no recordara nuestra relación anterior?. No lo sabía y tal vez lo mejor era dejar las cosas como estaban.

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¿Ese es Morinaga?, ¿qué está haciendo con ese chico?... ¿se... acaban... de...  besar?.

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Un gran dolor invadió mi pecho de repente y sentí como unas estúpidas lágrimas se acumulaban en mis ojos pero me negué a hacer el ridículo y las contuve.

Ya no quería seguir viendo esa escena por lo que apresuré el paso y fui en dirección a la casa de Matsuda-san.

Me podía hacer una idea del por qué me dolía tanto el que anduviera tonteando con ese otro chico pero no lo quería admitir. No, yo no era un homo-baka.

Después de divagar por un largo rato me encontré en la entrada de Matsuda-san por lo que toqué y en poco tiempo me abrió ella.

Matsuda:- Sou-kun, qué agradable sorpresa. Pasa.

Souichi:-Decaído pero reflejando seriedad en su rostro- Gracias -Entra.

Matsuda:- ¿Te quedarás a cenar?.

Souichi:- Sí...

Matsuda:- Bueno, en ese caso, iré preparando la mesa. Si quieres ve a decirle a Kanako que se lave y baje a cenar.

Asentí y me dirigí dónde Kanako para que bajara a comer. En cuanto me vio me dio un abrazo y me regañó por no visitarla más a menudo.

Después de comer, Kanako dijo que quería hablar conmigo y me arrastró a su habitación.

Kanako:-Preocupada- Nii-san, ¿qué pasó?. Estás más serio y cortante que de costumbre. ¿Algo pasó con Morinaga-san?.

Souichi:-Frunce el ceño- No, por supuesto que no. Son imaginaciones tuyas.

Kanako:- Así que sí es por Morinaga-san.

Souichi:-Bufa- Claro que no.

Después de eso Kanako no me dejó en paz hasta que le conté todo lo que había pasado. Desde que Morinaga perdió la memoria y que ya casi la había recuperado por completo pero que aún así me sentía raro. No le iba a contar nada más que eso.

Kanako:- ¿Por qué, Nii-san? Deberías estar feliz, Morinaga-san está casi recuperado.

No pude contestar a esa pregunta por lo que después de un rato le pedí a Kanako si me podía dejar a solas. Como pocas veces, me obedeció y me dejó solo con mis pensamientos.

Todavía no me quedaba claro qué era lo que me molestaba tanto. Al fin, él iba a dejar de acosarme y él sería feliz al lado de alguien que pudiera corresponderle.

Aún y con todo eso en mi cabeza, decidí dejarlo para otro momento.

Sería mejor descansar, mañana empiezo a trabajar nuevamente con Morinaga.

Continuará...