P R O L O G O |El trato

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Anastasia

-¿señorita Steele?

El señor Carrick Grey y su esposa Grace Trevelyan Grey, abogados prestigiosos que hace una semana contactaron conmigo para enamorar a su hijo, un empresario multimillonario que al parecer es adicto a su trabajo y no tiene tiempo para una mujer dando por hecho con la tipica preocupación de unos padres de creer que su hijo es homosexual.

Padres sobreprotectores diria yo para llegar a tal extremo de contratarme.

Han pasado alrededor de seis meses desde que salí de la clinica psiquiatrica de Sea Mar y unos cuantos mas desde que empecé a trabajar de lo que muchas personas podrian señalarte como una zorra, una cualquiera, tal vez una escort, una call girl o chica de compañia, aunque mis metodos son algo distintos y no me follo a cualquiera, solo los que darian un poco más a cambio de un pequeño extra que de ves en cuando admito disfrutar.

No tuve muchas opciones en la vida, después de que mi alcoholica madre supo que me cortaba me mando al manicomio. A primera instancia, me negue, pero una vez allí adentro la vida no es tan complicada-desayuno a las 8 am, terapia individual a las diez, almuerzo al mediodia, terapia de grupo en la tarde, cena a las siete y la hora de dormir reglamentaria a las 10pm- no como la realidad en la que ahora debo sobrevivir para pagar un apartamento lejos del novio y el vicio de mamá.

-un gusto señor Grey- estrecha mi mano, me ofrece asiento y como todo caballero acomoda la silla deslizandola hacia el frente.

-dime Carrick

Sus labios se curvan en una sonrisa seductora y su esposa a su lado lo nota.

-Grace- carraspea y extiende su mano para estrecharsela.

-solo queremos saber si lo logrará. Nuestro hijo es...- se miran entre si sin saber con que palabra describir a su hijo.

-sufrio mucho cuando era un niño y...- interrumpí a Grace.

-no se preocupen, es un hecho. Y hablando de la cuota...

-lo que sea- me corta Carrick con notable ansiedad.

-esta bien. Esta es mi cuota- saco una hoja de papel con la cantidad y otros aditamentos que necesitaré- esta es una lista de cosas que necesitaré saber de su hijo. Gracias a Andrea en una semana tengo programado una entrevista de trabajo como su nueva secretaria.

Ambos asienten metodicamente.

-¿estan seguros de esto?- siempre hago esta pregunta, muchos de los padres, hermanos, hasta el mismo cliente o cualquier otro familiar suelen echarse para atrás una vez que se ha comenzado con el trabajo y no suele gustarme trabajar a medias.

Ambos vuelven a afirmar con el movimiento hermetico de sus rostros.

Sonrio, concluyo la reunión con otra secuencia de saludos y salgo del restaurante.

Siempre he tenido cuidado con esta clase de trabajo y una regla ha sido primordial: jamás te enamores y si llegas a entablar una relación intima con tu trabajo debes hacerle saber que esto es solo compañia, un juego que amerita un poco de diversión. Este caso es distinto y acepté por curiosidad y ayuda en partes iguales. Es el primer cliente que no sabrá quien soy en realidad.

La mayoria de los clientes soy acompañados por un familiar que les comenta sobre mi trabajo y a que me dedico, otros me contratan directamente o con un tercero.

Esta vez es diferente y quiero hacer algo distinto. Algo que deje fuera mis provocativas piernas y mis pechos medianamente al alcance de la perspectivas de un hombre. Otra impresión.

Será simplemente divertido.

Mr. Grey (CEO #1) ©Where stories live. Discover now