Capitulo #33| ¡Mi mujer!

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Arrastré las piernas sobre el sillon y me atuse en un rincon cuando llegamos. Gideon dejó la maleta en la alcoba y Christian le dijo que se tomara el resto de la noche y que invitaba todo lo que quisiera del bar para acompañar la Big Mac que le compré, bueno, que le compro Christian por medio de mi ofrenda de paz por causarle muchos problemas al pobre de Gid.

-nos vemos Gideon

-buenas noches Ana- bajo la cabeza como gesto de amabilidad y se retiró.
El peso de la soledad cayó de repente sobre mi cuerpo. Estabamos solos y no era buena señal. Si quiero dejar las cosas claras debo concentrarme, y no fantasear con el mismisimo hijo de satanas que es un adonis.

¿porqué no tuviste que fallar un poquito, Dios? Tal vez una nariz respingona, un poco delgaducho, tal vez un labio más grande que el otro. No, lo tenias que hacer perfecto. Como la creación de las chicas superpoderosas, pero en vez de luz, color y dulces colocaron espinas, latigos y oscuridad a la mezcla.

Christian, serio y huraño, toma una de las sillas, que fugazmente me recuerda a él atado con las esposas, la desliza hasta colocarla enfrente de mi y sentarse en ella.

Se rasca la barbilla como un acto que se me antoja desesperado y ansioso.

-¿por donde empiezo?

-por el principio-acto seguido cruzo las piernas y estiro la mano acariciando sus nudillos, que en ese momento parecian temblar.

Apesarado, suspira- fui adoptado a la edad de cuatro años por los Grey. Para ese entonces nisiquiera intentaba acercarme a mi nueva familia, mucho menos a Jack que era dos años mayor que yo.- sus ojos estan fijos en nuestros dedos se entrelazan- mi nueva madre me prestaba más atención, mientras que papá nos trataba como igual. Grace siempre tuvo ese resentimiento hacia a Jack, crecimos separados. Mi madre lo envio a un internado y yo seria el que heredará el bufete, pero jamás me intereso el derecho y es así como empecé con mi negocio.-hizo una pausa- todo marchaba bien hasta que Jack volvio hace dos años. Me arrebato muchas cosas en poco tiempo y mi padre siempre se niega a creer que el bastardo de su hijo en un canalla. Para mi esta muerto.-sentencia, alza la mirada y le sonrio antes de inclinarme y depositar un beso en sus labios-¿porqué fue eso?

-un premio por ser sincero.

-deberia ser más sincero de ahora en adelante- se acaricio la zona con la yema de los dedos y fue como ver otra escena porno en camara lenta.

-¿Qué hay de los tatuajes?

-fue una adolescencia dificil-dice como si eso lo explicara todo y se pone de pie alejando esa sensación de calidez que siento cuando esta cerca. Es su manera de decirme que por hoy habia sido suficiente información.- descansa o me veré obligado a llevarte a la cama por las malas si comienzas un berinche.

Poco a poco estaba empezando a conocerme bien, así que le di las buenas noches, le agradecí su voto de confianza y me fui a dormir.

•••

Me despertaron los gritos de Christian, ojeé el reloj de mesa y eran las una de la madrugada. Me levante deprisa y subí las escaleras hasta la habitación que usa como despacho desde que estamos en Manchester. Cuando quise tocar a la puerta para preguntar si todo estaba en orden le escuche gritar nuevamente y me di cuenta que hablaba por telefono con Jack.

-escuchame bien imbecíl, si vuelves a pasarte de listo no me importará lo que papá diga. Recuerda, tienes lugar en mi empresa, no por voluntad propia, sino para hacerle un favor a mi padre...- advierte y continua después de un tremule silencio- no te acerques a mi mujer...- en un arranque lanza el movil impactando contra la pared haciendose trizas en cuanto abro la puerta y me sobresalto en el proceso.

-¡es mi mujer!-grita una vez más para si mismo y al darse cuenta de mi presencia se gira, echa andar en mi dirección y me abraza como si me necesitará más que a nada en este mundo. Acepto su muestra de cariño y le devuelvo el abrazo. Inhalo su olor profundamente.-no te alejes. No te vayas.

¡Mierda, Christian! ¿porqué tenias que hacer las cosas más complicadas?

-esta bien. No me iré.- me resigné y sus palabras taladran en mi cabeza.

Soy su mujer. Suya...

Mr. Grey (CEO #1) ©Where stories live. Discover now