¿Penny?

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Se escucho la puerta, fue abrirla rápidamente ya que estaba lloviendo y no quería que se mojara el peliazul.

-Hola Gumball- dijo mientras éste entraba- ¿Quieres agua?

-No gracias- se sentó en mueble.

-antes que Penny tomara asiento, su teléfono sonó, un mensaje de su padre había llegado diciendo: "No llegaremos temprano hasta que la lluvia pare, cuidate."
Terminó de sentarse junto a Gumball y dejo el teléfono hacía una lado.

-Bien Gumball, yo...yo ya no quiero estar más así contigo.

-Penny, al menos yo lo intente pero veo que tú no

-Gunball yo aún te amo

-Pues no parece...-la miró confundido

-¿No me crees?

-No, tú actitud y tu forma de ser conmigo me ponen en dudas.

-suspiró, se balanceó a él para robarle un beso en sus hermosos labios, éste se dejo llevar por la tentación- Te amo Gumball- le siguió besando.

-Ahg...- se separa- ¿Penny pero qué haces?

-Besandote- sus labios rozaban junto con los otros- Acaso, ¿no te provoca hacerlo?

-Si...-se acercó a ella y se empezaron a besar nuevamente.

-Sabía que me amas- lo acostó en el mueble y se puso encima de él, el peliazul observaba sus pechos grandes.

-Penny, por favor, no me provoques.

-¿Qué?

-Si me provocas no paro.

-Penny se quitó la camisa y sus senos se veían aún más grandes- Hazlo si quieres.

-¿Y tus padre?

-No vendrá mientras sigue lloviendo así de fuerte.- Gumball se levanto para tener en sus brazos así poderla besar y lamer.

La llevó cargándola al cuarto, le quitó la ropa y él se bajo el pantalón junto con la ropa interior y la porrista saboreaba su pene grande. Ambos disfrutaban de la pasión y el deseo que sentían; al estar ya húmedos, el peliazul se puso el preservativo,no pasó mucho  en escucharse gemidos y jadeos por toda la casa. No tardaron para llegar al clímax.

-Ah!!!... Gumball- estaba exhausta la porrista, acariciándole el sedoso cabello al peliazul que estaba en su pecho respirando fuerte por el cansancio-Te amo. Lo miró

-Yo también te amo Penny- la besó.- Por favor, quedate conmigo.

-Claro que si Gumball- cerró los ojos por un momento mientras que el otro buscaba la ropa para vestirse.

Al calmarse la lluvia Gumball se va a su casa, no pudo dejar de pensar en lo paso y en lo había hecho. Ambos se sentían muy satisfechos.

Al llegar a casa...

-Hola Gumball, ¿cómo te fue?- preguntó el hermano

-Hola amigo...bien- respondió con tranquilidad.

-¿Resolvieron las cosas?

-Sip

-Y... ¿Como quedaron?

-Somos novios de nuevo- sonrió- Me voy a mi cierto, quiero dormir.

-Eh... Está bien, descansa!- estaba extrañado por la en lo dijo, pero a na vez no le daba mucha importancia

Al día siguiente...

Darwin estaba desayunando tranquilo y vio la actitud de Gumball, estaba feliz nuevamente como si no hubiera pasada nada.

Ya están en el instituto observó como Penny y él se hablaban y reían como si nada pasó entre ellos, ya no había discusiones, ni problemas y ni tristeza pura felicidad y risas entre ellos, Darwin no era el único que les extrañaba verlos así.

-Esto no tiene sentido ayer se odiaban y hoy se aman- pensó- ¿qué clase de amor es este?- siguió pensando, tratando de analizar lo que pasaba- Nunca loa había visto así, ¿qué fue lo que realmente pasó entre ellos?, no creí que hayan hablado, Gumball siempre se la pasa hablando de ella cada maldito segundo y ya me tiene harto de eso.

Seguía analizando el hermano, h aún no entendía que fue lo que paso entre ellos.

Pasaron dos semanas y estos seguían igual de felices, salían y demostraban su amor en público, bueno aveces, pero si se notaba mucho que se amaban tanto el uno como el otro. Mientras que Gumball salía en la tarde con su novia Darwin se que daba en casa esperándolo.

-Ya no aguanto más... Ya es hora de que me reúna con Penny  Fitzgerald.

Sentimientos [TERMINADO]Where stories live. Discover now