Séptima Parte

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Esa mañana no me importaba ir al colegio, tampoco que me mirasen mal, no me importaba nada, esta realmente feliz.

A la hora de comer fuí al patio, ya que quería que me tocáse el aire y no me sentía del todo cómoda en la cafeteria.
Toda la alegria que llevaba esta mañana se fué cuando les ví, y Celia me miró con pena, pero no se acercó.

Estaba sentada en el césped, contra la pared, comiendo.
Me vine abajo, no me encobtraba nada bien, echaba de menos a mi amiga y estaba cansada de estar sola en el instituto.

- Hola.
Me giré de goloe hacía la berja que rodeaba el colegio. Ahí estaba, detrás.
Le sonreí y me acerqué a él.
- Hola. - dije
- ¿Estás bien? - me prguntó
- Bueno, ahora mejor. - Sonreí, me sonrió. - no me encuentro muy bien.
- ¿Son ellos?
- Supongo.
- ¿Quieres venir? - me dijo, señalando su moto.
- Bueno, jaja es que no puedo salir.

Hizo una pequeña sonrisa maliciosa y me señalo la berja, sugeriéndome saltarla.
Acepté.

Pusé un pie y el me ayudo con su mano, hizo que fuera muy fácil.

- Vamos - dije nerviosamente cuando oí el timbre de cambio de clase. Nunca había hecho una cosa parecida.

Al principio solo pensaba en los problemas que me podria llevar ese acto de rebeldía.

Me llevó a los bunkers de Barcelona, siempre había querido ir.

Me daba mucha rabia no llevar la cámara encima ya que era un sitio precioso y me encantaba la fotografía

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Me daba mucha rabia no llevar la cámara encima ya que era un sitio precioso y me encantaba la fotografía.

Hablamos durante horas, me explicó que él estudiaba cine, en la unuveridad, que curiosamente es lo que yo estudiaré de aquí 2 años.

Hacía frío, era diciembre, pero no me importó demasiado, era tan bonito.

Me miró y dijo:

- ¿Te puedo besar?- dijo, esa pregunta me sobresaltó pero era justamente lo que quería con la persona que quería y el sitio donde quería.
- Depende. - contesté
- ¿De qué? - preguntó sin dejar nunca de sonreir.
- De lo bien que lo hagas.

Quién soyWhere stories live. Discover now