Find You | Behind You 2

Capítulo 4: Mi Actitud

Niall:

La he echado de menos desde aquel día tan horrible, recuerdo la sensación del momento en el que la sostuve entre mis brazos mientras ella sangraba... Su cuerpo se enfriaba y yo sentía que mi vida se desvanecía. Si ella moría, yo lo haría con ella. Bese su frente. La ambulancia llegó y la trasladaron al hospital, una gran impotencia se apoderaba de mí al no poder entrar a ver como se encontraba Colbie.

Las horas en la sala de espera mientras le realizaban la intervención me parecían años... A cada minuto revisaba el reloj que estaba colgado en uno de los muros de la sala, mis manos sudaban y sentía miedo, mucho miedo. Cuando entre a la pandilla jamás imagine sentir miedo otra vez.

Incluso me había prometido a mí mismo jamás hacerlo de nuevo, pero es cierto que el amor te hace alguien vulnerable. Te convierte en una persona propensa al dolor, pero después de todo trae mucha alegría con el.

Los momentos que pase con Colbie no los cambiaría jamás, no quiero olvidarlos. Son los mejores que me pudieron haber ocurrido. Y ahora estoy solo.

Recuerdo aquella mañana en la que desperté, lo primero que hice fue voltear mi cara en dirección a su cama, quería verla ahí. Despierta, consiente y con vida.

No divise nada, al principio creí que era debido a que acababa de despertar, me frote los ojos y parpadee antes de girar otra vez la cabeza.

Pero la sorpresa fue grande cuando vi su cama echa y sin un solo rastro de ella. Supuse que era una broma, me incorpore y me dirigí al baño para buscar a Colbie. Abrí la puerta y no había nada. Inmediatamente corrí fuera de la habitación en busca de los doctores y enfermeras que la atendieron. Los busque, pero parecía como si hubieran desaparecido de la faz de la tierra.

Nadie sabía nada, incluso los registros médicos que tenían sobre Colbie habían sido eliminados de la base de datos del hospital, como si no existiera.

En ese momento me acuerdo de mis acciones tan claramente. Enloquecí. Tome la computadora de la recepción y la estampe contra una pared, abrí cada uno de los cajones de los archiveros y tire las carpetas que encontré ahí.

Rompí una gran cantidad de medicinas y jeringas, incluso quise entrar a las salas de operaciones y destrozar los equipos.

Quebré los vidrios de cuantas ventanas pude, antes de que tres enfermeros me sujetaran y un doctor me inyectara un somnífero.

Al abrir los ojos me encontré con un par de miradas llenas de preocupación, mi visión se aclaro y pude divisar los rostros de Lucy y Josh. Ambos tenían expresiones de tristeza y ojeras.

- ¿Dónde estoy? -inquirí mientras sentía que mis músculos estaban adormecidos.

-Estamos en casa de Lucy, muchacho -respondió Josh, acerco una silla y se sentó al lado de la cama.

-Fue muy brusco lo que hiciste en el hospital, no debiste reaccionar así -reprocho Lucy.

-Es muy fácil para ti decir eso -dije enojado, no estaba de humor para sermones me sentía terrible y desesperado.

-Tuvieron que sujetarte para que no acabaras con el hospital entero -informo Josh-. No es tu culpa que George y Marissa hayan decido quitarnos a Colbie, después de todo ellos son sus padres, no podemos hacer nada -suspiro.

- ¿Pero qué mierda dices? -Vociferé apretando los puños-. ¿Qué no podemos hacer nada? -dije sarcástico-. Ellos no tenían el derecho de apartarla de mí ¡no tenían el derecho! -grite.

-Niall por favor deja eso -pidió Lucy, vi mi mano y note que había sujetado el vaso de vidrio que estaba colocado sobre la mesita de noche.

- ¡Me jodieron la vida! ¡George y Marissa! ¡Y el maldito cabrón de Dylan! -me queje. Sentía el impulso de tirar cosas, solo así me liberaría de esta terrible ira. Me incorpore y agarre lo más cercano a mi alcance, tire una lámpara al otro lado de la habitación. La lámpara se partió en dos y el bombillo se revento en un millar de trozos. Luego sujete un libro e imite mi acción anterior, el libro aterrizo sobre el piso con un ruido sordo, no se rompió y eso provoco que mi ira incrementara.

Mis arranques de ira habían sido constantes y lo único que me calmaba era ir a bares y embriagarme hasta que no fuera capaz de ponerme de pie. Lucy y Josh me regañaban todo el tiempo, diciendo que mi actitud no los ayudaba en nada. Es posible que tuvieran razón, pero nada de lo que me digan me interesa.

Me arrepiento de no haber salvado a Colbie el mismo día que la perdí, tal vez si tal solo hubiera seguido mi corazón no estaría con este sentimiento de culpa, al menos sabría que había hecho las cosas bien y que no había abandonado a Colbie cuanto más me necesitaba.

Había encontrado a varios muchachos que al igual que yo encontraban un gran alivio en el alcohol, así que se podría decir que eran mis compañeros de juerga. Todas las noches hacíamos lo mismo, maldecíamos a quien se había atrevido a arrebatarnos la felicidad, cantábamos canciones deprimentes, a pesar de que eso empeoraba nuestro estado de ánimo y nos embriagábamos hasta que nadie podía caminar. Cada mañana era la misma, despertaba cerca del medio día y comía muy poco, ni siquiera me preocupaba por mi apariencia. Usaba la misma sudadera por días y mi ropa desprendía un olor a bebidas alcohólicas, humo de cigarrillo y sudor.

Sabía que no era algo agradable para Lucy y Josh, dado que cada vez que me acercaba a ellos hacían una mueca de desagrado. Amenazaron con echarme de casa si seguía comportándome así, pero no podía evitar sentirme vació y solo. No sentía nada, a excepción de un hueco en el lugar donde antes se encontraba mi corazón. La soledad, ese sentimiento que te absorbe y que te destroza poco a poco cuando a persona que amas no se encuentra cerca.

Juro que puedo formar una de las cascadas más grandes del planeta, si junto todas las lágrimas que he llorado y continuo llorando por Colbie, cada noche mis lágrimas resbalan por mis mejillas mientras me embriago.

Pero llorar no me calma y nada lo hará, nada me importa. Solo quiero verla otra vez, aunque sea la última...

***

-No podemos seguir en esta situación Niall -dijo Josh severo mientras me observaba con el ceño fruncido.

- Ustedes no lucen tan mal como yo.

-Tu actitud nos está enfermando a los dos. Gracias a ti no podemos dedicar el cien por ciento de nuestra energía en la búsqueda de Colbie -añadió Lucy.

-Tienes que calmarte y dejar de causar problemas ¿sabes cuantas veces despierto en la noche sobresaltado? ¿Cuántas veces voy a ver tu habitación para asegurarme de que llegaste intacto a casa? -inquirió Josh.

-No lo entienden, pero ¿qué puedo esperar? Sí ustedes no perdieron al amor de su vida -siento que tengo una ligera jaqueca y sacudo la cabeza.

-Yo perdí a una hija y Lucy perdió a una hermana -dice Josh y coloca su mano derecha sobre su corazón-. ¿Acaso puedes ver dentro de mi mente para estar tan seguro de saber cuáles son mis sentimientos? -murmura.

-Amo a Colbie, no debiste llamar a sus padres. Ellos tienen parte de culpa y la otra parte te pertenece -replique.

-Niall, Josh y yo decidimos en mandarte a Florida, tal vez respirar un nuevo aire te ayude. Ya compramos tu boleto de avión y el vuelo es para mañana. Así qué esta noche ni sueñes en salir de casa, te quedarás aquí y alistaras tu equipaje.

-No tienen el poder de hacer eso -discutí.

-Claro que sí, yo acepte que Colbie saliera contigo y si puedo en este mismo momento te mato. Todavía no olvido que eres un criminal, parecías bueno para mi pequeña, pero si continúas así lo único que vas a provocar es tu muerte -afirmo Josh severo y me miró ferozmente.

-Supongo que no dejarán que hoy por a noche escape -dije, entendiendo mi derrota.

Pobre Nialler esta sufriendo :'( y Colbie está tan tranquila...

¡Colbie el rubio te extraña! Sí no lo quieres, compártelo XD

¡Gracias por todos sus votos y comentarios!

!LAS AMO, ADORO Y QUIERO INFINITAMENTE¡

Pd: En el siguiente capítulo ocurrirá el tan esperado reencuentro...

Dedicado a: @CamiQuintero