Rápidamente guardé el libro que había venido a buscar y me dirigí a la salida, pero antes de abandonar aquel sitio y retomar el camino hacia mi casa me detuve en aquella puerta al escuchar la voz de Allan.

- Hey! Creo que es muy tarde para que regreses sola a casa. Déjame acompañarte.

- Yo creo que llegar con un extraño a casa es aún peor.

- No seas así Alice! déjame acompañarte no quiero que te vayas sola y menos a esta hora, además es por mi culpa. No debía haberte entretenido tanto.

Su oferta no era tan mala. Por lo menos me ahorraría el viaje en autobús y así podría llegar más rápido a mi casa, ya que si me tomaba un autobús me llevaría más tiempo. Además no quería que este chico me viera como una aguafiestas sino como alguien que vive al máximo cada minuto de su vida.

- Bueno, pero no demores

Ya estando afuera esperé a que Allan cerrara la librería y me llevara a mi y a aquel pequeño perro a nuestro hogar.

- Listo, ya podemos irnos

- Genial! Donde tienes tu auto?

- Yo nunca hablé de un auto

- Entonces si no tienes un auto, en que nos iremos? porque yo no pienso irme caminando

- En moto

Y allí estaba la moto aparcada en un pequeño estacionamiento privado que solo podían utilizar  los que trabajaban en aquel sitio. 

Buscando mi propio final felizWhere stories live. Discover now