Final alternativo.

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—¡Jimin! ¡¿Jimin qué tienes?! ¿Qué te pasa? —preguntó aterrado de ver a Jimin en ese estado, llorando, gritando y quejándose, se retorcía y tocaba su pecho y cuello, agarraba la piel como tratando de arrancarla.

Jungkook no sabía que hacer, su mente seguía en blanco. Su alma dejó su cuerpo cuando vio la sangre correr por la marca del lazo. Las venas en el cuello de Jimin se marcaron.

Jungkook corrió hacia el teléfono y llamó una ambulancia. Miró a Jimin que seguía en el suelo, gritando por ayuda.

Quería que alguien le ayudara a calmar ese dolor que lo mataba. Que sentía que lo desgarraba. Sintió las manos de Jungkook posarse detrás de su cabeza.

—Tranquilo, Jimin, ahora viene la ambulancia para ayudarte, todo va a estar bien —dijo, sus manos temblaban, le dolía ver a su amigo sufrir, le dolía verlo en ese estado.

Jimin seguía gritando de dolor, y Jungkook comenzó a llorar, de desesperación, de rabia y de impotencia de no poder ayudar a su amigo.

—Jimin, aguanta, por favor —le rogó ente el llanto. Los ojos de Jimin se movían de un lado al otro, su respiración era rápida. Jungkook sintió a su lobo desesperado.

Jimin comenzó a perder fuerzas, sus quejidos comenzaron a ser más bajos y Jungkook sintió como empezó a relajar el cuerpo.

—Jimin... ¡¿Hay algo que pueda hacer?! —Jimin levantó lentamente la mano y tocó la marca.

Allí fue cuándo todo encajó para Jungkook, su alfa rugió y él mismo también sintió la furia. El lazo se estaba rompiendo, el infeliz de Yoongi había roto el lazo.

Pensó rápidamente, no tenía tiempo. Jimin agonizaba y lamentablemente, sabía que aún así llegaran al hospital, habían pocas posibilidades de que Jimin se salvara.

Maldijo en mil formas a Yoongi, mira que romper un lazo con su omega en cinta. Las manos de Jimin tomaron las suyas y lo hicieron reaccionar.

—Jung...Jungkook —susurró, el corazón de Jungkook se estrujó—Ayúdame —el alfa asintió rápidamente.

La única manera de detener el dolor... era que un alfa marcara a Jimin. Así, su lazo lo salvaría, no sólo a él, sino que a su cachorro.

Jungkook no tenía una pareja, y por alguna razón su alfa se sentía cómodo con Jimin.

Su alfa lloriqueaba ante los llamados del omega de Jimin. Debía salvarlo.

Tomó una gran bocanada de aire y se acercó al cuerpo de Jimin. Pálido y débil, el omega se acurrucó.

—Perdóname, Jimin... —le dijo, Jimin sintió la respiración del menor sobre su cuello y aún con el dolor matándolo por dentro—Pero voy a sanar el dolor Jimin, te voy a salvar —frunció el ceño, apretó los brazos de Jungkook. Éste depositó un beso en la frente del mayor—A ti y a tu cachorro —sin pensarlo, Jimin asintió rápidamente, quería dejar de sentir ese dolor, pero lo más importante, Jimin quería salvar a su cachorro. No pensaba en ese momento.

Jungkook luchó contra Jimin que seguía retorciéndose, tomó delicadamente su barbilla y la hizo a un lado, exponiendo su cuello, donde no había marca.

No le serviría de nada marcar a Jimin donde Yoongi ya lo había hecho antes. Tenía que abrir otra marca.

Dejó un beso en la piel de Jimin, y rápidamente, clavó sus colmillos en el cuello del mayor, Jimin arqueó la espalda ante las sensaciones que eso desató. Saboreó su sangre y acercó a Jimin más a su cuerpo.

Jimin abrió los ojos y soltó un jadeo, el dolor comenzó a ceder y sentía algo nuevo florecer en su lugar.

El alfa de Jungkook aulló al ya tener un omega, pero no era cualquier omega, era el de Jimin.

Mistake | Two-shot (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora