Gloria, Honor y Sangre!!!, El comienzo.

Argentina (3 parte)

-Puedo preguntar porque no has regresado hermano- frente a el, se encontraba su copia exacta, pero en ves de tener su cabello largo como el, lo tenia corto, pero en ves de encontrar una mirada seria y fria, habia una sonrisa y tambien una vestimenta màs perfecta, ordenada y pulida, aunque claramente ha veces era un desastroso cuando se referia a dibujar sus pinturas pero eso era otra historia.

-Desde cuando tengo que responder por lo que hago, si siempre hago lo que deseo, ¿o no es asi? hermano- dijo con insolencia nunca habia sido del tipo que hablaba bien ni siquiera con su hermano mayor Anibal, Escipion incluso le retaba para enfrentarle pero nunca le habia ganado en terminos de poder, su hermano superaba con creces a otros dragones era demasiado fuerte para cualquier otro enemigo.

-La ultima ves que te mande hasta las tierras del hielo perpetuo, regresaste en unas horas-

-¿Y acaso no puedo pasar un tiempo cazando en el bosque?-

-Nada màs, un poco de curiosidad al menos queria ver quien era ella, al menos le salvaste la vida a tiempo antes que el veneno llegara a su corazòn o hubiera tenido que actuar yo- Anibal giro su cabeza para mirar hacia lo lejano-apresurate hermano tendremos un invitado de tierras Mexicanas, por los rumores sera algo interesante para ti y tal ves para todos los de nuestra "clase"- se retiro caminando al apuntar a la ciudad de los Buenos Aires, simplemente se desvanecio en el aire al caminar.

-Que poder- Escipion que cargaba con sus manos un mamut Argentino bestia de colmillos gigantes y tambien con plata entre el marfil de las poderosas protuberancias una extraña combinaciòn pero tambien una de las màs cotizadas en el mundo el famoso "marfil plateado" o "Marfi Argentum" un poco de luz hacia brillar los poderosos colmillos pero tambien estos eran un arma letal con la cual esta poderosa bestia podria crear rayos electricos y devastar ciudades, a pesar de todo el poder que tenian estas magnificas criaturas, eso no significaba un problema para un dragon el cual le habia matado de un golpe certero al craneo.

Ademas de sus magnificos colmilos plateados, tenia una piel dura por la misma plata que comia de las rocas del suelo, por lo que tenia un pelaje plateado-rojo, pero en las noches de luna llena, se veia como una bestia de color blanco, incluso los españoles tenian problemas tratando con este ser, pero cuando se capturaba a uno, valia cientos de monedas cada pedazo de su existencia.

Lo cargo facilmente por un rato, hasta salir del bosque con rapidez y luego avanzar hasta la ciudad y llegar a sus afueras.

Dirigio su paso hasta el centro de la ciudad, la gente se quedo boquiabierta mirando como un hombre cargaba un Mamut Argentino, bellas y poderosas bestias, y tambien peligrosas.

Se dirigio al unico lugar de la ciudad donde se permitia la compra de productos cazados en el bosque, un poco de la tirania que tenia el diputado de esta ciudad, controlandola con sus mercenarios.

Arrojo su carga en el suelo sin demasiado interes en el cuidado de su caza y entro en la tienda.

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100 pobres idiotas.

-¿Entonces hay que matarle?-

-Claro que no, obviamente hay que invitarlo a unirse a nuestro pequeña agrupaciòn, no cualquier che es capaz de matar un Mamut Argentino- dijo el lider de los mercenarios que estaba sobre su silla llena de diamantes, mirando al grupo que se encontraba en su base de operaciones-pero si no logramos hacerlo, matenlo- salio con el resto de los jefes, era una orden bastante irregular ya que siempre unian a gente como ellos, bandidos, ladrones, matones dentro de su grupo de mercenarios y por su lejania con el resto de las ciudades y cercania ala patagonia lespermitia ser ajenos al gobierno central.