Tres.

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Louis y Harry caminaron por la calle agarrados de la mano y riéndose como tontos pues casi habían acabado en el suelo tras tropezarse cuando salían del local.

Al llegar a su edificio, el ojiverde metió la llave en la cerradura con un poco de trabajo, ya que estaba bebido y no acertaba bien, al fin lo consiguió entre risas pues Louis volvió a tropezarse, esta vez con los escalones del portal.

Subieron al ascensor y el ojiazul empotró a Harry contra el espejo y comenzó a besarlo desesperadamente, sin casi darle tiempo a reaccionar.

—Dios, eres tan rematadamente sexy, Hazza.

El ojiverde se sonrojó tiernamente ante el apodo que Louis le acababa de poner, este gruñó ante eso pues eso lo  puso más cachondo de lo que estaba.

—Voy a deborarte, cariño—le susurró al oído haciendo que las piernas de Harry temblaran de deseo.

El ascensor se paró finalmente en el segundo piso y el rozado caminó hasta su puerta a tropezones pues sus extremidades apenas le respondían y Louis lo seguía de cerca sonriendo maliciosamente, mientras le miraba el trasero.

Abrió la puerta de su casa, entraron rápidamente y entonces Louis la cerró de golpe y empezó a besarlo de nuevo, caminando hacia atrás hasta llegar al sofá donde lo tiró y se puso encima suyo para seguir besándole y acariciándole.

La ropa empezó a sobrarles y con vergüenza Harry se detuvo.

—Tienes un condón a mano, Louis.

El ojiazul sonriendo se sacó uno de su bolsillo.

—¿Éste te sirve, princesa?.

Tras asentir sonriendo, siguieron besándose y tocándose hasta que de nuevo Harry empezó a balbucear.

—L-Louis pa-para, pa-para... emm...es me-mejor que nos vayamos a mi habitación. No quie-quiero que mi he-hermana nos en-encuentre aquí desnudos o lo que es p-peor, ha-haciéndolo.

—Como quieras, precioso.

Rápidamente recogieron la ropa que se habían empezado a quitarse y corrieron hacia la habitación de Harry, éste cerró la puerta y ansiosos se tiraron en la cama.

Louis atrapó a Harry de nuevo y empezó a besarlo desesperadamente, entonces terminó por desnudarlo del todo, luego cogió su erecta polla y empezó a bombearla con ganas, lo que hizo que el rizado empezase a gemir de placer.

— Oh sí cariño... chílla para mí. Dime lo mucho que te gusta—habló el ojiazul con voz lasciva.

— ¡Aah!... ¡si, Louis!, ¡me gusta!...¡me gu-gusta mucho!.

Poco después, el modelo sustituyó la mano por la boca y empezó a chupar con entusiasmo, mientras el ojiverde arqueaba su espalda, gritando por el placer que estaba sintiendo.

—¡Oh Dios Lou-Louis!, ¡esto es increíble!... ¡oooh me encanta!, ¡eres maravilloso!.

Tras unos minutos dejó de chupar y volvió a bombearla con las manos, haciéndolo cada vez más rápido hasta que Harry empezó a jadear muchísimo más fuerte, ya que estaba próximo a correrse.

— ¡Sí, cariño!, ¡sí joder!, ¡córrete para mí!—gritó el ojiazul triunfante.

El rizado no pudo aguantar más e irremediablemente se corrió soltando hilos de espeso y blanquecino semen en la mano de Louis, que luego este limpió con la camiseta de Harry que  le indicó.

—Bien...ahora prepárate, cariño. Vas a sentir estar en la gloria y tocaras el cielo— habló éste poniéndose el condón y colocándose entre las piernas del ojiverde.

Alineó su polla con el agujero de Harry y poco a poco se introdujo dentro de éste, el cual arqueó la espalda y abrió la boca soltando un gran gemido ocasionado por la breve molestia que sintió.

Tras esperar que Harry se acostumbrase a su ancho miembro, Louis empezó a moverse sacándola y metiéndola de su interior.

Poco a poco fue incrementando las penetraciones entre jadeos y suspiros de los dos, hasta que próximo al éxtasis volvió a coger la polla del rizado y se la volvió a bombear para que esté volviera a correrse.

Cuando lo hizo, Louis detuvo su mano y acto seguido se derramó en el interior del rizado, soltando un gran gemido de placer, luego se desplomó sobre éste agotado por el esfuerzo.

Cuando recobró el aliento, se acostó al lado de Harry y se sacó el condón, el ojiverde se giró para volver a besarse y finalmente muy abrazados se taparon y se quedaron completamente dormidos.

Cuando recobró el aliento, se acostó al lado de Harry y se sacó el condón, el ojiverde se giró para volver a besarse y finalmente muy abrazados se taparon y se quedaron completamente dormidos

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17. Dentro de ti  -(Larry Stylinson). Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora