2.

195 23 2
                                    

Joder, Charlotte, tu maldita capacidad de acaparar mis pensamientos es sofocante. ¿Tienes idea de lo mucho que me atormentas? Por supuesto que no. Y si la tuvieras, ¿dejarías de actuar así? ¿Dejarías de acercarte un momento sólo para empujarme lejos al otro? 

Yo no sé ni por qué me estoy quejando... Soy quien te llevó a esto. Mi culpa; las decisiones que tomas ahora, el que te distancies de mí, el que parece que te rindes constantemente. Es todo mi culpa. Si no fuera tan idiota esto no pasaría. ¿Pero cómo no ser idiota si estoy tan asustada de lo que siento? Me tienes completamente para ti, ¿pero eso qué importa si no soy él, verdad? Él... Siempre es él. ¿Cómo me podrías culpar por alejarte si cuando te veo con él algo en mí se rompe? Y él, como el ciego que es, no sabe que eres suya. Pero yo lo veo. A veces, te brillan los ojos cuando lo ves, ¿lo sabías? Quizás es el reflejo de las lágrimas que se forman por el dolor que el amor que le tienes te causa. Se me hace fácil notarlo porque es la forma en la que yo "evito mirarte". Déjame decirte que soy un fracaso en eso, acabo viendo tu perfil cuando no te das cuenta. No puedo resistirme a ti, Charlotte... Acabo detallando tus labios, tus ojos, tu nariz, tu cabello, tus cejas, tus mejillas. ¿Por qué tienes que ser así? Así tan... Perfecta para mí. ¿Por qué no puedo yo ser perfecta para ti? Porque no puedo poner a alguien más por sobre mí, no después de todo lo que ya hubo en mi historial. Soy tan cobarde en el presente por culpa de mi pasado. Lo di todo la cantidad de veces suficientes como para quedarme sin nada sino yo misma. Ya, sólo me tengo a mí. Me elijo a mí por sobre los otros. No te merezco. Pero él tampoco, creo yo. Sin embargo, lo que yo crea no hace diferencia, seguirás cegada por ese amor que le tienes. ¿Qué pasa con el amor que yo te tengo? Lo acumulo. A veces explota y me destruye, a veces me sofoca, a veces logra escaparse en forma de pequeños detalles. Últimamente me volví mejor conteniéndolo, sin embargo. Pero cuando siento que me necesitas te juro que quiero correr hacia ti. Lástima que hay una muralla llamada "yo" que se interpone entre mi corazón, que tanto te ansía, y tú. Quizás es mejor así, o quizás este es un terrible error.

Me cuesta organizar mis pensamientos. Sé que no leerás esta carta porque ni siquiera planeo dártela.

Estoy perdiéndote y me estás perdiendo. Estoy alejándote tanto que ahora tú también haces lo mismo conmigo. ¿Y cómo puedo recuperarte si cada vez que tengo la oportunidad siento temor? Temor de dejarte entrar y que transformes en algo más importante para mí que yo misma. Soy yo quien tiene el problema. Soy yo quien inició la guerra. Soy yo quien dio el primer paso hacia el olvido porque no quería enamorarse. Y soy yo quien no es capaz de dejarte ir por completo. Te empujo, te halo; te tiro, te levanto; te tomo, te suelto. Si estás confundida, créeme, no eres sólo tú. No sé lo que hago pero el amor es el culpable. Esto de no ser correspondida mata desde adentro hacia afuera, consume el interior. Por supuesto, el dolor que te causo es culpa mía por egoísta. Pero... Si te abro el corazón de nuevo, si te busco, si te persigo ahora que huyes, ¿cuánto más dolería la próxima vez que recuerde que no sientes lo mismo?

Y tú... ¿Cuánta decepción más vas a aguantar?

Y yo, ¿cúantas veces más, Charlotte, no seré capaz de elegirte por sobre mí?

Joder.

"¡Joder!" Cartas a Charlotte.Where stories live. Discover now