Tal Para Cual || Legends #1

Cap VII: Trasero De Hojalata

En la mesa solo estamos tres personas; Tony, Steve y yo. Fury esta de pie. No puedo asimilar que Coulson este muerto, me prometió ver un maratón de películas y no me puede dejar este día y ningún otro. Se supo que debo estar feliz hoy pero, es todo lo contrario.

Fury tiene algo entre sus manos. Ninguno de nosotros dice nada, de vez en cuando se escuchan los sollozos que se me salen.

-Dianne- miro a Fury-. Coulson quería darte esto.

Sobre la mesa deja un sobre el cual desliza para que llegue a mis manos. Lo tomo, en letra cursiva tiene escrito "para mi pequeña guerrera". Una pequeña sonrisa se me escapa, así solía llamarme. Pequeña guerrera. Coulson decía que yo era invencible, que nadie me podía vencer a la hora de luchar.

Otra cosa arroja Fury a la mesa, se me cierra la garganta al ver las tarjetas de colección de Coulson manchadas en sangre.

-Coulson las traía en su saco. Nunca logro que se las firmara- le dice esto ultimo a Steve.

Coulson era el fan numero 1 de Rogers. Casi le da un infarto cuando supo que Steve estaría aquí.

-estamos paralizados en el aire. Nuestra comunicación, la ubicación del cubo... Banner, Thor.

Estamos acabados. Fury sigue hablando, pero ya no lo escucho. Rogers esta mirando una de las tarjetas de Coulson, por un segundo me mira y regresa su vista a las tarjetas. Ya no lo resisto más, necesito estar sola un momento para poder llorar la muerte de Coulson.

Sin decir ni una palabra o mirar a alguien me pongo de pie y camino a donde sea que me lleven mis pies, que sea lo más alejada posible de todos. Parece que mi cerebro juega conmigo, estoy junto donde Coulson murió.

Me quedo viendo la mancha de sangre de la pared, la sangre de mi Coulson. Aun tengo ese sobre, lo abriré después de que derrotemos a Loki. No olvido que el sabe sobre mi, y también se que es un cobarde que huye de una pelea.

Pagar muy caro. Algo que he aprendido es a llorar en silencio, una vez me rompieron el corazón y me dije a mi misma que seria la ultima vez que alguien me vería llorar. No tiene nada que ver con la muerte de Coulson, pero nadie me vera llorar. Lagrimas caen por mis mejillas y ningún sonido sale de mi boca. Estoy de pie con los brazos cruzados mirando como limpian la sangre, cada que siento que el más mínimo sonido saldrá de mi boca, aprieto la mandíbula.

-¿Dianne?

No me molesto en voltear, sigo con la vista fija.

-Dianne- Steve se pone a mi lado-. Siento mucho lo de Coulson.

Solo asiento. No me siento con ánimos de hablar. Rogers me toca el hombro en señal de consuelo, como no me muevo ni siquiera lo miro, pasa todo su brazo por mis hombros y al final me acerca a el para abrazarme. Le correspondo el abrazo, aunque no lo demuestre necesito uno. Un pequeño sollozo se me escapa.

-shhhh, ya- me acaricia la espalda.

Me abraza unos minutos más. Tengo tan mal aspecto que podría asustar a un niño.

-¿tenia esposa?

-salia con una chelista, creo- me limpio las lagrimas.

-¿que es lo que contiene el sobre? solo por curiosidad.

-no lo se, lo abriré después- sorbo la nariz.

-bebieron ser muy unidos.

-era como el hermano mayor que no recuerdo- trato de sonreír, parece mueca.

Miro su camiseta, esta empapada de lagrimas, que pena.

-lo siento, por llenarte de mis lagrimas- me rasco el cuello, cosa que hago siempre.