Capítulo 2 - Beso

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Camino por la orilla del mar y me alejo un poco de la fiesta. Busco a mis hermanos y no los veo, su amigo me comento que ellos me esperarían aqui. Observo que estoy bastante alejada de la fiesta y cuando estoy por volver alguien toma mi brazo y me da la vuelta y me atrae a sus brazos. Intento zafarme pero me es imposible.

-Sueltame. Porfavor -hace caso omiso y empiezo a asustarme.

-¡SUELTAME! -grito y me levanto exaltada

No puede ser. Otra vez esa maldita pesadilla que durante cuatro años, noche tras noche, no me deja dormir.
Tengo que superarlo por mi bien y salir adelante. Veo el despertador y son las 5:45 a.m, me levanto y voy al baño a hacer mis necesidades,me cambio con ropa deportiva, saldré a correr.

(...)

Media hora despues regreso a mi departamento y cuando estoy abriendo mi puerta, observo el departamento de mi hermano Andrés y como siempre, una mujer distinta saliendo cada mañana. No cambia.
Entro a mi departamento derecho a la ducha y me doy una de 10 minutos. Me pongo vestido gris pegado a mi cuerpo hasta poco arriba de las rodillas, tacones rosa palido, me ondulo el cabello y me aplico de maquillaje lo necesario.

Desayuno una ensada de frutas, Waffles con chocolate y un vaso con leche y chocolate, despues voy a lavarme los dientes.
Salgo camino a las oficinas y veinte minutos despues exactamente a las 8:00 a.m. cuando voy a tomar al elevador, choco contra una pared de musculos y caigo de culo al suelo. ¡MALDICIÓN! Observo desde el suelo y me encuentro con el gran hombre que puede volver loca a cualquiera "claro y también a ti ¿o no es asi?" Callate estúpida subconsciente, "claro tu solo sigue negando que te encanta "
Maldi...

-Señorita Bianchi, se encuentra bien. -me ofrece su mano y la tomo. Como las veces anteriores la misma corriente se siente y creo que el lo nota ya que me suelta y vuelo a caer al suelo. ¡DIABLOS! -oh lo siento.

-No se preocupe, el error fue mio, compermiso -paso por su lado pero el me retiene. -¿que se le ofrece?.

-Suba conmigo en el elevador privado -me dice con una sonrisa, como decirle que no, "no que no".

-Como cree señor.

-Claro que si, acompáñeme -me toma del codo y me jala con el hacia el elevador privado de la empresa que solo usa el. Entramos en el y marca el ultimo piso.

-Se ve muy guapa señorita Bianchi -diablos, maldito sonrojo.

-Gra-gracias -tartamudeo nerviosa y a el solo le crece la sonrisa. Llegamos y me sede el paso, siento su mirada recorrer mi cuerpo. Llego a mi lugar de trabajo y el entra a su oficina.

-Señorita Bianchi venga porfavor -me dice por el intercomunicador -Claro señor -respondo. Voy camino a su oficina. Cuando toco y abro la puerta, doy el primer paso alguien me impulsa y caigo de rodillas al suelo.
Veo a mi lado izquierdo y entra una mujer con un vestido super corto y unos tacones enormes, mirandome con cara de asco. Mi jefe me observa y me ayuda a levantarme.

-¡¿Qué te pasa veronica?! -levanta la voz y da miedo.

-Esta inepta que no sabe hacer su trabajo -dice. Pero que se cre.

-Dejenos a solas Andrea porfavor -me dice y observo a la mujer que mira nuestras manos juntas. Rápidamente la suelto y salgo.

Marcus POV

La mañana siguiente esperaba con ansías ver a andrea, no se la razon pero tenia que verla. Al llegar a la empresa la observo y va directo a los elevadores y por malicia choco contra ella y cae al suelo. Cuando la ayudo a levantarse siento esa misma corriente y la suelto volviendo a caer ella al suelo.le pido disculpas y la ayudo a levantarse, después le ofrezco que se valla conmigo en mi elevador privado. Cuando vamos en el la observo de reojo y lleva un vestido gris hasta poco cinco dedos a las rodillas y ajustado con unos tacones un poco alto, se ve muy bien.

-Se ve muy guapa señorita Bianchi -se sonroja y se ve hermosa

-Gra-gracias -tartamudea nerviosa. Sonrio con malicia.

Cuando llegamos a nuestro piso el cual es solo para nosotros dos y nadie mas. Ella sale primero y me permito admirar su cuerpo. Tiene buenas cuervas y marcadas y un buen y gran trasero me gustaria apretarlo y...

Veo que se aleja y la sigo, llego a mi oficina y entró.

-Señorita Bianchi venga porfavor -le digo por el intercomunicador -claro señor -responde.

Justo cuando andrea va entrando algo la arroja al suelo y puedo ver a la culpable, Verónica.

-¡¿Que te pasa verónica?! -levanto la voz realmente enojado mientras ayudó a Andrea a levantarse.

-Está inepta que no sabe hacer su trabajo - espeta realmente enojada.

-Déjenos a solas Andrea porfavor. -digo y ella se va. Vuelvo a mi escritorio y verónica se sienta en frente mio. -¿que te cres para venir y tratar a mis empleados como se te de la gana?.

-Tu mujer -si claro, cree que por acostarnos solo un par de veces ya es mi mujer. A mi solo me interesa una.

-Tu no eres mi mujer, ¿cres que por acostarnos un par de veces ya lo eres?.

-Pero... -la interrumpo.

-Pero nada. Ahora te pido que te largues y no vuelvas, y que tampoco trates asi a mis empleados.

-Per... -la vuelvo a interrumpir

-¡LARGO! - grito realmente molesto por su comportamiento con mi pequeña. Que mierda "mi pequeña"

-¡IMBECIL! -me grita y sale de la oficina. Que se valla a la mierda.

-Andrea podrías venir a mi oficina porfavor -le informo por el intercomunicador -claro señor -me contesta. 2 minutos despues entra ella con la cabeza baja.

-Digame señor -dice con la voz un poco ronca, me levanto y voy hasta ella.

-¿Que le pasa Andrea? -la llevo hasta en sillón y nos sentamos.

-Nada -dice viendome por un segundo y bajando la cabeza.

-Si es por lo que paso hace un momento no se preocupe ya la puse en su lugar -le digo sonriendo y ella tambien me sonrie y se le marcan dos pequeños hoyuelos en sus mejillas.

-Gracias -me dice.

-No hay problema -me dice y nos quedamos viendo y me acercó poco a poco a ella y tomo su cara con mis manos. La acerco un poco mas a mi y nuestros labios rozaron. La beso y ella se niega al princípio pero después me sigue el beso. Dios, esto es la gloria. Mi lengua pide paso a la suya y la acepta gustosa. La suelto cuando me quedo sin aire.

-Perdón... N-no fue mi intención... C-compermiso -se disculpa y sale despavorida.

De seguro es como ella, maldita sea, una interesada que se hace del rogar y despues como si nada

-¡MALDITA SEA! -grito furioso y salgo de la oficina -¡ya no voy a regresar hasta mañana, encárguese de todo! -le digo con rabia a andrea.

-C-claro señor -dice y salgo de ahi.

Miedo al amor (Libro No. 1)Where stories live. Discover now