Cambio Radical ©

Capítulo 30

El camino a casa fue tranquilo Nico se durmió al instante.

Estacione el auto y bajé a mi bebé con cuidado para después llevarlo a su habitación, Dul se quedó con él mientras yo regresé al auto por las maletas.

Subí a mi habitación de nuevo y comencé a desabotonar mi camisa. Sentí unas décadas manos acariciando mi pecho desde atrás y unos finos labios besando mi hombro.

Dulce: Nico duerme como un ángel de nuevo- susurró y yo sonreí.

Chris: gracias bonita… - me giré, tomé su rostro entre mis manos y la besé tiernamente.

Dulce: ya dormí al bebé... pero ahora es tu turno- acarició mi pecho.

Chris: ¿Me vas a dormir?- dije riendo.

Dulce: todo lo contrario- dijo coqueta, tomó mi mano y comenzó a caminar hacia la cama.

Se recostó sobre la cama y yo me recosté sobre ella para después apoderarme de sus labios, ella correspondió a mi besó y rodeó sus brazos tras mi nuca.

Libramos nuestro cuerpo de todas las prendas que llevábamos.

Me separé de ella un poco y admiré su rostro, el brillo en sus ojos y su hermosa sonrisa.

Acaricié su mejilla y ella suspiró.

Chris: te amo mi amor- ella acarició mi rostro y jugó con el cabello de mi nuca.

Dulce: yo te amo a ti Chris…- besé sus labios antes de unirnos físicamente.

Una unión que se sentía tan especial como si fuera la primera.

Suspiraba y gemía cerca de mi rostro mientras susurraba los te amo y las palabras que no pude decirle éste tiempo.

Cuando ambos llegamos a la liberación me quedé sobre ella tratando de no lastimarla hasta que nuestras respiraciones se controlaron.

Besé sus labios y salí de ella para después acostarme a su lado y atraerla a mi cuerpo.

No hacía falta decir nada, habíamos demostrado todo lo que sentíamos así que simplemente nos abrazamos y regalábamos caricias hasta que ambos caímos en un profundo sueño.

Cuando desperté la luz del sol iluminaba toda la habitación.

Abrí mis ojos y frente a mí estaba la mujer más linda que había visto. Besé sus labios y ella comenzó a despertar.

Chris: buenos días bonita- sonreí.

Dulce: buen día monstruo- suspiré

Chris: esto no parece real… soñé tanto con despertar y tenerte conmigo que ahora me parece otro sueño.

Dulce: es real mi amor- sonrió- estamos juntos y esto es real- besé sus labios y lentamente me coloqué sobre ella. Nos besamos hasta que un agudo gritó nos separó- eso también es real.

Chris: yo voy con él- dije riendo y me levanté.

Llegué a la habitación de mi bebé y él ya estaba totalmente despierto y de pie en su cuna, al verme dio pequeños saltos y sonrió.

Chris: buen día hijo…- lo tomé en mis brazos- pero que sonrisa tan linda.

Llegué a la habitación y prácticamente Dul lo arrebató de mis brazos para llenarlo de besos y mimos antes de alimentarlo y cambiarlo, Nico sólo reía con los besos de Dul.

Desayunamos tranquilamente y después me preparé para regresar a la constructora, en estos días se habían acumulado muchas cosas pendientes y aunque Poncho y Chris me ayudaban había cosas que sólo yo podía atender y para eso agradecía la compañía de Ana que siempre me apoyaba en todo y me hacía las cosas un poco más fáciles.

Chris: amor ya me tengo que ir- ella estaba en la sala jugando con Nico sobre la alfombra- regresaré lo más pronto posible… avisé al guardia del fraccionamiento y vendrá a revisar que todo esté bien al menos cada hora… tendré mi celular siempre conmigo por si necesitan algo y… creo que es todo… ¿Quieres que le pida a Poncho que venga también a revisar?

Hablé bastante nervioso pero me moría de pánico dejarlos solos en casa con ese loco suelto y capaz de quién sabe que cosas.

Dulce: mi amor sólo te faltó conseguir al ejército- dijo divertida.

Chris: lo intenté pero no cedieron – ella miró con los ojos abiertos- es broma…- me incliné para besar sus labios- me preocupan mucho.

Dulce: estaremos bien- sonrió

Chris: lo sé- me incliné para besar el rostro de Nico- adiós campeón- besé los labios de Dul- adiós bonita… llamaré en un rato.

Salí de casa y subí a mi auto para dirigirme a mi trabajo.

A la hora de la comida ya había cumplido casi con la mayoría de mis pendientes.

Poncho entró a mi oficina algo molesto.

Chris: que carita ¿Qué tienes?

Poncho: mal día eso es todo… además tengo noticias que no sé si sean buenas o malas.

Chris: ¿Qué pasa?

Poncho: la audiencia se adelantó para mañana, tenemos que estar ahí a las 10.

Chris: pero es muy pronto… Aun no estamos preparados y necesitamos…

Poncho: Chris saldrá bien, estuve hablando con los testigos y todos aceptan declarar a tu favor, además varias maestras y padres del kinder que te conocen te apoyan, el estudio económico está listo y eres completamente estable para mantener a un niño… lo tenemos todo listo amigo.

Chris: muy bien- susupiré más tranquilo- ¿Entonces qué tengo que hacer?

Poncho: nada, ve a casa a pasar el día con tu hijo y tu novia… Prepárense y mañana nos vemos en el juzgado… lleva algo de ropa para Nico...por simple requisito.

Chris: muy bien, entonces me voy… muchas gracias amigo- abracé a Poncho.

Poncho: ganaremos Chris… mi ahijado no se separará de nosotros… por mí bien debemos ganar.

Chris: ¿Por tu bien?- dije alegre.

Poncho: te imaginas que me haría Anny si perdemos… te aseguro que ese sería mi único hijo antes del celibato- dijo riendo y yo lo imité.

Chris: lo imagino créeme- tomé mi sacó y mi celular- nos vemos mañana amigo.

Salí de mi oficina dispuesto a pasar un grandioso día con mi familia y a retomar la actitud positiva que tanto necesito en este momento.

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