Y te estoy diciendo que no me voy

3. Don't stop me now

El día de las audiciones llegó. Agoney estaba apoyado sobre una de las hojas del gran portón de la entrada, esperando a Nerea y a Miriam. Los tres habían ensayado mucho durante la semana anterior para clavar su actuación. La gallega instruyó a ambos acerca de cómo moverse por el escenario pues Nerea, tras enterarse de que su amigo había pedido ayuda a Miriam, confesó que también se sentía bastante insegura con respecto a su lenguaje corporal.

La primera en llegar fue la rubia, que llevaba la bufanda casi hasta la nariz. Le saludó haciendo un gesto con la mano y se apoyó en su hombro. Tenía mucho sueño. Estaba tan nerviosa por la audición que casi no había dormido.

—Vi el vídeo que subiste ayer. Me encantó.

—Gracias.

—¿Al final es esa canción la que cantarás hoy? —Nerea le respondió simplemente con un murmullo a modo de afirmación—. ¿Te pasa algo?

No obtuvo respuesta. El tema quedó zanjado en cuanto Miriam les saludó. Aunque Agoney pensaba preguntarle más tarde a Nerea qué la tenía comportándose de forma tan rara. Tras seis horas de clase y un breve almuerzo en el comedor, se dirigieron al auditorio y ocuparon tres asientos de la cuarta fila de butacas. Delante de ellos, en primera fila, había un chico y una chica. Al verlos llegar se giraron y saludaron al grupo.

—Son Ricky y Thalía —dijo Nerea susurrando, a pesar de que el profesor no se encontraba aún en la sala—. Cuando acabemos te los presento.

—¿Thalía? No recuerdo verla en la hoja de inscripción.

—Hace el bachillerato musical, lo cual quiere decir que tiene menos horas de instituto y pasa la mayor parte del tiempo en el conservatorio. Probablemente se enteró de que se iba a abrir un coro antes que yo, pero no habrá tenido tiempo de venir a apuntarse.

Agoney asintió. La tal Thalía parecía bastante profesional. Pudo comprobar que así era cuando Javier Ambrossi se presentó ante los alumnos que no le conocían y llamó a la extremeña a subir al escenario la primera. Antes de eso les aseguró que no tenían por qué estar nerviosos puesto que al ser tan poca gente no habría una gran criba; con saber entonar bastaba. Aun así, Thalía puso el listón muy alto desde el primer momento. Escogió un tema de Lea Michele llamado On my way. Sabía moverse rellenando todo el espacio y era muy expresiva a la hora de cantar. El canario quedó impresionado con el nivel que había, cuando simplemente estaban en unas audiciones de instituto. Después de Thalía actuó Ricky, que parecía un auténtico showman. Hizo una interpretación de Don't Stop Me Now que habría sido alabada por el propio Freddie Mercury.

—Ricky es como un ente del instituto. Algunos tienen hermanos mayores, ya en la universidad, que le conocieron. Nadie sabe cuándo entró ni cuántos años tiene realmente. Algunos dicen que es un fantasma —le explicó Miriam a Agoney en voz baja.

—Te estoy oyendo —replicó el aludido desde la primera fila, aunque en un tono jocoso.

Después de dos actuaciones espectaculares era el turno de Nerea, que parecía un poco asustada. Tras escuchar las palabras de aliento de los cuatro presentes se subió al escenario y se situó bajo un enorme foco. Las primeras notas de Una vez en diciembre comenzaron a salir de los altavoces y la catalana se acercó al micrófono. Cantaba desde el corazón como si, al igual que Anastasia, intentase recordar a alguien que había formado parte de ella en el pasado. Estaba tan sumergida en la canción que ni se enteró cuando se abrió la puerta y una chica atravesó corriendo el patio de butacas, aunque intentando no hacer mucho ruido. Se sentó junto a Agoney y Miriam, y se quedó mirando al canario mientras Nerea cantaba. No quería hablar mientras una compañera actuaba así que cuando la canción terminó y Javi Ambrossi se puso a hablar con la rubia, dijo: