CAPÍTULO 13

691 97 27
                                    


Me encontraba aterrada en aquella bañera sumergida en la total oscuridad.

Comencé a temblar y llorar presa de la angustia; prefería quedarme sorda a ciega, ya que perder la vista me hacía depender de los demás y era imposible de ocultar.

Usando mis manos temblorosas, tanteé el borde de la bañera para saber dónde colocar mis piernas para salir. Tardé una eternidad en poder ponerme de pie al otro lado de la bañera; ahora solo faltaba encontrar una toalla con la que envolverme.

La casa de los Bartholy era bastante fría y húmeda, nada de estufas o inventos modernos sino solamente chimeneas. A veces pensaba que todos ellos habían salido de un bucle del tiempo del pasado como ocurría en los libros, pero sonaba a demasiada fantasía. Y los viajes en el tiempo en la realidad no existían, como tampoco existía la magia o las criaturas sobrenaturales contando a los fantasmas.

"No llores idiota, busca una puta solución" me gritaba a mí misma, debía de mantener el control y debía hacerlo bien para saber fingir delante de los hermanos.

Intentaba usar el humor o pensar en otra cosa para relajarme, pero era realmente difícil porque estaba en un estado lamentable; mi cabeza no podía soportar tanta presión. Hice memoria para recordar donde estaban situadas las cosas en el baño y caí en la cuenta en el colgador que había en la parte superior de la puerta, por lo que fui tanteando la pared hasta tocarla.

Cuando llegué a la puerta y situé el pomo, alcé la mano y una textura rugosa que reconocí en seguida llegó hasta mis dedos. Pude tomar una toalla lo suficientemente grande como para cubrirme el cuerpo antes de salir del baño.

Sentía un alivio tan grande que no pude evitar lanzar un suspiro tan potente que vibró en mi pecho. Ahora solamente faltaba secarme y vestirme. Para evitar caerme o tropezarme, comencé a gatear por el suelo tanteando la moqueta, pero en ese preciso instante, la puerta de mi dormitorio sonó y escuché al otro lado a Nicolae.

-Nicole, ¿Puedo pasar?

Mierda, ya habían vuelto...no hagas ruido...no hagas ruido....

No era el maldito momento de visitas, porque si entraba estaba perdida por completo. Y si encontraba mi bote de pastillas, la explicación iba a ser aun peor.

Intenté moverme hasta la cama para intentar meterme debajo por si lograba entrar por otro lado; esta casa parecía tener demasiadas puertas ocultas y yo no la conocía bien. Además, conocía el espíritu caballeroso de Nicolae y lo veía capaz de derribar la puerta si notaba indicios que estaba en el cuarto y no le abría la puerta.

Pero gateando choqué con la mesilla, rompiendo la lámpara contra en suelo. Mierda, ¿Ahora que iba a hacer?, no podía hacer como si no estuviera porque hasta un sordo habría oído ese espantoso ruido de la porcelana al caer al suelo y convertirse en polvo. La voz de Nicolae sonaba más preocupada que antes:

- ¿Nicole, que pasa?, abre la puerta por favor...

Tanteé los cajones del armario para ponerme alguna cosa tuviendo la enorme suerte de que mi bata se me cayó encima.

Ventajas de ser desordenada; la ropa se te cae encima y no tienes que buscarla. Intenté ahogar una risa de satisfacción y mi humor comenzó a mutar en cuanto mi cabeza me dijo: "Tienes que abrirle la puerta a Nicolae y fingir que ves, aunque no ves realmente"

Decidí contestarle para que no se impacientase y montara un escándalo mayor; no me apetecía tener al resto de los hermanos olisqueando por mi alrededor.

-Espera que ya voy-Dije con fastidio a lo que Nicolae contestó con un suspiro aliviado, ¿Qué pensaba, que me habían abducido o qué?

Él era demasiado sobreprotector y a veces hablaba como si perteneciera a otra época. Era extraño que un hombre de unos veinticinco años hablara de esa forma tan extraña. Por no hablar de su ropa de noble, pero admitía que le daba un cierto encanto.

Titanium(Is It Love?Nicolae) #AwardsSubmarino2022 #CalliopeAwards2022Where stories live. Discover now