Historias corrientes [EunHae]

V. Magia.

En una de sus salidas con Kyuhyun para ir a buscar libros, Hyukjae había encontrado un viejo libro de limpieza para mantener el hogar perfecto. Según Kyuhyun, las personas que compraban cosas como esas eran unos pirados perfeccionistas y obsesionados con la limpieza.

A Hyukjae sus palabras valían tanto como las pelusas del suelo.

Pero el fotógrafo consideraba que todo tenía uso en la vida y por eso pagó lo que el libro costaba. Cuando llegó a la casa, decidió poner en práctica algunos de los trucos que venían en el libro y tras leer la receta varias veces, fue capaz de realizar uno de los productos caseros con éxito. Al principio todo iba perfecto: la casa estaba brillante, olía de forma deliciosa y todo tenía un aspecto como nuevo que encantaba a Hyukjae; aunque después la cosa se descontroló un poco y él terminó encerrado en el baño prácticamente vomitando por culpa del horror a azufre que había parecido a la casa, luego trató de levantarse y caminar de vuelta al salón, pero el suelo parecía haberse vuelto hielo y era imposible mantener el equilibrio sin resbalarte cada dos pasos.

Cuando Donghae llegó a la casa y se encontró con su novio deslizándose por el suelo y un desagradable olor en el aire, solo tuvo tiempo de agarrar a Hyukjae, sacarlo de allí y llamar a Kyuhyun para descubrir si tenía alguna idea de cómo podían solucionar eso. Pasaron una semana entera viviendo en el antiguo apartamento de Siwon, esperando a que su casa fuese completamente liberada del horroroso olor y de la extraña capa resbalizada que había aparecido sobre el suelo de su hogar.

—Repíteme una vez más por qué estaba la casa así —pidió Donghae con el ceño fruncido y Hyukjae se pasó una mano por el cuello, sonriendo sin vergüenza.

—¿Porque tu novio quería tener la casa más limpia del mundo con productos caseros? —inquirió.

—¿Me lo preguntas o me lo afirmas? —cuestionó el otro con la voz cargada de furia.

—Deja de amargarte, Donghae —se quejó el fotógrafo—. Agradece el hecho de que tu novio siga dándole este tipo de emoción a nuestra relación.

—¿Qué emoción?

—La de mantener viva la magia. —Sonrió de manera seductora antes de inclinarse y darle un beso.

Donghae jamás había sentido tantas ganas de besarle y pegarle a la vez.