Capítulo 32

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(Matteo)

-¡Matteo!-el berrido de Nina consiguió que mi trasero se presentase con el suelo... de nuevo.

-¿¡A qué ha venido eso!?-grité sopándome la parte golpeada.

-¡Llevo media hora hablándote y no me haces ni caso!

-Perdona, no te escuché.- dije tranquilo.

-¿Demasiado ocupado pensando en mi amiga?

La sangre trepó por mi cuerpo directa a mis mejillas, por suerte conseguí retenerla.

¡¿Estaba por sonrojarme?! ¡¿Qué?! ¡¿Pero por qué?!

-Sí, planeaba como matarla sin dejar pistas.-mentí.

Nina, trató de pisarme pero fui más rápido que ella y me aparté a tiempo. Aunque me cueste admitirlo, Luna es la única con suficiente velocidad como para golpearme.

¡En tu cara Nina!

-¿A dónde vamos?-preguntó mi prima mirándome de manera amenazadora, sonreí ante su acción.

No conseguía aterrorizarme, si fuese otra... Tal vez sí.

-¿Recuerdan el lugar donde íbamos de pequeños?

-¿El lago que estaba cerca de casa de la abuela?

-Ese mismo.

-Pero la casa está completamente abandonada.

-No es así.-Nina sonrió como si fuera cómplice de una travesura.

-¿Eh?

-Luna y yo solemos ir muy a menudo para limpiarla, es nuestro refugio.

-¿¡Qué!? ¿¡Esa bruja ha estado en casa de la abuela!?

Esta vez no pude evitar la patada que Nina me dio en la pierna, por suerte no acertó en la espinilla así que no dolió tanto.

-¡No la insultes!

-¡Solo digo lo que es!¡Y lo que digo es verdad!

El segundo golpe no consiguió llegar, por suerte la detuve. Para mí, casi todo el mundo me resulta predecible, salvo ella.

¿Por qué no paro de compararla con los demás?

-¿Entonces suelen ir allí?-preguntó Federico.

-Sí, ¿Vamos? Hace tiempo que no estoy con ustedes allí.

La sonrisa sincera de Nina, me impidió negarme. Así que salí a la calle y arranqué el coche en señal de que subieran.

Pero había algo en una calle que no me dejaba estar tranquilo...

Casualmente era por la que se había marchado Luna.


(Luna)

-¿Qué quieres?

No me basto con tener que lidiar contra las locas taradas que persiguen al orco todos los días, sino que, además, ahora me encuentro con Simón y no me deja pasar. 

¡¿Este es idiota o que?!

Tampoco tengo ningún problema en abrirme paso a la fuerza.

-Hablar contigo.

-Quítate de ahí.- le señale el camino.- ¿Okey?

-No te diré que me obligues porque sé que puedes hacerlo.

"Amor Fingido" (Lutteo)Where stories live. Discover now