sinematic ִֶָ yoontae

二

◤2:45 AM◢

❝Taehyung siempre fue como un ave, un pequeño pero hermoso pájaro que agitaba sus alas en buscar de conocer más allá de su entorno. Era curioso, tanto como un niño, y también alegre.

¿Qué haces cuando se te rompe un ala?

Chanyeol no dejaba de llamarme, él estaba tan preocupado, incluso Namjoon notaba que algo pasaba. Pero en ese entonces sólo era una tenue sospecha, un pequeñísimo presentimiento en nuestras cabezas.

Un martes, a la hora de mi almuerzo, Chanyeol me visitó. Jamás dejaba de ser el chico alegre que conocí, halagó mi nuevo tinte de cabello y me obsequió un frappé, bromeamos respecto a sus rizos, ya que le dije que le hacían ver como un cachorro peludo. Pero cuando tocamos el tema de mi hermano, cuando le pregunté si habían tenido problemas, sombras aparecieron entre sus irises. Incluso el hielo de la bebida pareció derretirse.

"No sé qué pasa con él, Seokjin hyung. Sólo una mañana en la universidad no quería hablarme. ¿Le he hecho algo malo?"

Pasé mis manos completamente heladas por mis mejillas, intentaba pensar para darle una respuesta al afligido de Chanyeol. Mi mente no dejaba de pensar en el comportamiento de Taehyung con él. Era como si... lo hubiese desechado.

Tal vez Taehyung ya no se sentía seguro con los sentimientos hacia Chanyeol, tal vez estaba pasando por una confusión. Tan sólo pude prometerle al chico castaño que hablaría con mi hermano, que seguramente todo saldria bien.

Ver sus ojos avellanados llenos de desesperación hizo que me sentara frente a Taehyung en esa misma noche, mientras él cenaba en un extraño silencio.

Lo miré atentamente, miré la delicadeza con la que sujetaba el tenedor y la increíble paciencia que ejercía al pasar el cuchillo sobre un guisante para partirlo en dos; él comió una parte solamente.

"TaeTae" -Lo llamé.

Él no me hizo caso, mi llamado quedó en el aire y nunca aterrizó en sus oídos. Aclaré mi garganta y lo llamé de nuevo.

"Taehyung."

Él sólo levantó la mirada. Pude notar que su bonito cabello rubio, que ahora era cubierto por la capucha de su sudadera, creció un centímetro.

"¿Pasa algo? Estás muy callado."

El miró el corte de carne a medio comer sobre su plato. Esperé su respuesta, pero se demoró.

"He notado que Chanyeol no ha venido a cenar. ¿Pasa algo con él?"

Volví a hablar al ser preso de su silencio. Él negó levemente con la cabeza, sin mirarme.

"¿Discutieron? Sabes que puedes contarme lo que sea. Y buscaré una solución para ti, hermanito."

Le animé con una sonrisa cariñosa, moví mi mano hacia la suya para darle un apretón. Pude sentir como se estremeció. Alzó la mirada y noté un brillo cálido característico en él, incluso ví como las comisuras de sus labios comenzaban a levantarse para formar una sonrisa. Sin embargo, se esfumó a los segundos siguientes.

Di un saltó en mi asiento cuando escuché un golpe proveniente del pasillo de las habitaciones. Ambos miramos hacia ahí rápidamente, yo buscando alguna respuesta.
Taehyung quitó su mano de la mía y se puso de pie torpemente, tiró el tenedor al hacerlo tan apresurado.

"Hablaré con él"

Pude escuchar por fin palabras de Taehyung pero en cuanto lo hizo desapareció por el pasillo para encerrarse en su habitación.

Mi corazón latía con rapidez, y me descubrí rasguñando el mantel bordado de la mesa entre uno de mis puños.

¿Qué había sido eso?

Di un salto más sobre la silla cuando el teléfono comenzó a sonar. Por un momento sentí el sonido más fuerte de lo normal.
Me permití respirar tres segundos para luego ponerme de pie y levantar el aparato.

Mi cuerpo se hizo agua cuando escuché su grave y alegre voz al otro lado de la línea. Un escalofrío me recorrió la espuma y me tranquilizó.

Namjoon me saludó con alegría, dijo que estaba a una cuadra de casa con un par de cervezas y comida chatarra.

Sonreí cuando abrí la reja que separaba el jardín de la calle. Mi cuerpo aún tenía un ligero temblor por el acontecimiento de hace un rato, por lo que no dudé en arrojarme a sus brazos y besar sus labios como si no lo hubiese hecho esa misma tarde.

Y una vez que estuvimos en mi habitación sentados en una manta sobre el suelo, pude relajarme completamente. Le conté un poco de lo que estaba pasando con Chanyeol y Taehyung a mi novio, él dijo que probablemente era muy íntimo y que Tae intentaba llevarlo por su cuenta. Dijo que probablemente estaría bien, que no me preocupara, que todos fuimos así a su edad.

Asentí, intentando convencerme y dejar la paranoia. Hice a un lado todos mis pensamientos así como mis prendas y las de Nam. Le di pasó a la tranquilidad y a las manos de mi novio sobre mis piernas. Sus besos me adormecían y su lengua hacia que mis piernas temblaran cuando tocaba ese punto que me enloquecía.

Esa noche fue demasiado mágica, gemí su nombre incontables de veces, me permití seguir soñando con él hasta que un sonido en particular se coló en mis oídos y me hizo abrir los ojos.

Namjoon estaba dándome la espalda, profundamente dormido. Miré a mi alrededor. 4:33. Fruncí las cejas y me senté sobre la cama. Nam se removió ligeramente y lo miré, envidiando su serenidad pero sonriendo de todas formas. Lo cubrí correctamente con las sábanas y me puse de pie y colocarme ropa interior.

La melodía se seguirá escuchando.

¿Nuevamente Tae trasnochaba?

Caminé hasta la puerta y salí al pasillo, ahora la melodía del piano se escuchaba más clara. Caminé hasta esa puerta y medité en si abrirla o tocar.
Mordí mi labio inferior, debía reprender a Tae de todos modos. Giré la perilla y abrí la puerta. Un golpe en las notas se escuchó, desentonando la melodía y dándole acceso al silencio tortuoso.

Mi corazón se aceleró y mi garganta se cerró.

Taehyung estaba completamente dormido sobre su cama, pero aún podía escuchar el eco del piano en la habitación y taladrando mis oídos.❞

« Desviste tu cuerpo, sujetalo sobre mi cabeza.
Porque sabes que si tocas, siempre te dejaré entrar »