Bonita (Lumón)

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Capítulo dos: "No olvides sonreír"

Luna Valente

Suspiré aliviada, al observar el reloj, faltan 4 minutos para el almuerzo. Mi estómago ya no aguantaba una hora más sin comer.

Al oír el grandioso sonido, deje que todos salieran del salón. Quedando yo siendo la última. Como siempre.

– Luna, cuando salgas cierras la puerta –asentí, mientras la maestra salía del aula–

Agarre mis cosas, y me fui caminando tranquilamente hacia la puerta. La cerré como me lo había indicado la maestra.

Al llegar a la dichosa cafetería estaba hecho un caos....la verdad no me sorprendo, siempre es así.

Por suerte yo traigo mi propio almuerzo, así que no pierdo mi tiempo en formarme.

Salí al patio trasero de la escuela, es el único lugar pacifico qué hay aquí. Me recosté en el viejo árbol de siempre.

– ¿Cómo estás Rami? – acaricie al árbol–

"¿Acaso perdiste la razón?"

No, pero vamos no tengo amigos, y este árbol es lo único que no me rechaza, no me juzga. Y además siempre me escucha cuando más lo necesito y para mi, la verdad es lo mejor que puede existir.

"Bueno, ya entiendo por qué no tienes amigos"

Auch. Suspire y saque mi almuerzo junto con uno de mis libros favoritos.

– Hola – alce ligeramente mi vista – ¿me puedo sentar contigo? – arrugue mi frente –

– ¿Enserio? Habiendo tantas personas en este miserable instituto, eliges sentarte conmigo ¿enserio? –

"Felicidades Luna, la única persona que te habla, la tratas como si fuese basura"

– Pues la verdad, eres la única persona en este miserable instituto, que me agrada –

Por alguna rara razón salió de mi una pequeña sonrisa, aunque parecía más bien mueca que otra cosa.

– Entonces, ¿si me dejas sentarme? – suspire he hice a un lado mi mochila para que se pudiera sentar alado de mi, lo cual el hizo y me sonrió–

– Entonces, Luna ¿cual es tu canción favorita de Five seconds of summer?– por dentro me quede sorprendida, se acordó de mi nombre– ¿Cómo no me voy acordar de tu nombre? Si es muy lindo, como tú –

Abrí mis ojos sorprendidos y un poco sonrojada.

– No lo pensé, ¿verdad? – el negó riendo – Ammm, pues la de young blood –

– Uf, la letra esta buena – asentí – Tienes buenos gustos – volví asentir – ¿No sonríes mucho, verdad? – negué – Bueno espero que eso cambie – fruncí el ceño –

– ¿Por qué quieres que cambie? Si así soy yo – suspiro pasando una mano por su cabello –

– No creo que seas así, yo digo que aparentas ser así debido a que estás sola, y lo entiendo, pero créeme te ves más linda si sonríes –

Oímos el timbre, el receso finalizó.

– Bueno Luna, te veo al rato– se levanto al igual que a mi –

– Si adiós si......

No me dejo terminar ya que sentí sus brazos alrededor de mi cintura, yo me quede inmóvil ¿debería a completar el abrazo?

En menos que pude notarlo se separó de mi.

– No olvides sonreír – dijo entrando al instituto–

¿Por qué quiere que sonría?

"Por qué dijo que te ves más linda sonriendo"

Lo sé pero, no puedo sonreír todo el tiempo sería fingir, y yo la verdad no quiero fingir algo que no siento.