Stalker ;;☀ Minsung

;;☀

— No llores —espetó el chico frente a él, con rostro duro.

Mentiría si dijera que no estaba asustado. Además, lo descubrió llorando, Jisung no podía sentirse más humillado.

No dijo nada al respecto, se mantuvo callado, con ojos brillantes y rojos por las lágrimas, sus labios temblando por igual, sólo mirando al chico frente a él.

Un poco más alto que él, con cara dura y intimidante a cierto punto, al menos para Jisung era intimidante, con unos lindos ojos azules, cabello rubio y piel acanelada que complementaba su buen perfil. El desconocido tampoco dijo nada por un momento.

— Los niños lindos no deberían llorar —dijo aún con su rostro inexpresivo.

Jisung dió una risa seca antes de hablar: — Entonces puedo llorar.

— No; eso significa que no puedes llorar, lindo —¿Acaso el chico estaba...? No, ahora qué piensas Jisung. — ¿Cuál es tu nombre? —preguntó mientras tomaba asiento en el anterior asiento del pelirosa.

Al no recibir respuesta, medio sonrió y palmeó a su lado, dando a entender que se sentara junto a él.

Jisung no se negó, pero río un poco por todo ese lío.

— ¿Qué es tan gracioso? —había un dejo de burla en el tono del rubio.

— ¿Eres así con todos? Bueno... Mejor dicho, ¿eres así siempre? —Jisung miró al chico rubio y no podía negar que sus ojos eran lindos.

— ¿Sobre preguntar nombre a chicos lindos? —bromeó un poco.

— ¿Qué? ¡No! Ah... —el pelirosa cubrió un poco su rostro con una de sus manos. — Yo hablaba de ir a interrumpir personas mientras lloran y después conversar tranquilamente mientras la lluvia cae ante sus pies —le sonrió un poco.

— No sé por qué lloras si tu sonrisa es linda... —sonrió triunfal cuando vio por sobre la lluvia un leve sonrojo en la cara del pelirosa. — Digamos que puedes ser la excepción, bonito —el rubio le guiñó un ojo descaradamente mientras sonreía.

— Jisung. Eres agradable —soltó Jisung de repente con una sonrisa.

— ¿Ah? —sólo le tomó un par de segundos captar el significado de esas palabras para poder responder: — Oh... Soy Changbin —el tal Changbin le sonrió y fue muy tonto estar sonrojado pero no puedo evitarlo. — Te queda —dijo sin rodeos. — Jisung es igual de lindo que tú.

Jisung sentía que moriría por lo caliente que se sentía su rostro en ese momento. Ese chico era un descarado y confianzudo, pero era agradable.

— ¿Quieres compañía a casa? —Changbin se ofreció con una sonrisa y Jisung asintió sonriendo.

Caminaron un poco y el pelirosa habló de nuevo.

— Gracias, creo. Además, no te quedas atrás, Changbin también te queda —dijo mientras andaba a un paso lento bajo la lluvia junto al chico rubio.

— ¿Lo crees?

— Sí, sin duda. Es un buen nombre para personas rudas e intimidantes, ¿no lo crees? —Jisung río un poco.

— ¿Por qué todo el mundo cree eso? —sonrió mientras giraba su rostro para ver al pelirosa. — No me puedo ver tan rudo... ¿O sí?

— Ah, debía de esperarse que tuvieras mucho ego, ¿no es así? Además, ¿cómo no te van a ver así? ¡Mírate! Seguro intimidas hasta policías, no lo dudo.

— Podríamos ir a la estación y ver como intimido a unos cuantos.

— Ah, calla, no soporto la risa —habló entre risas Jisung.

— Vale, vale —alzó sus manos declarando paz. — Pero Jisung...

— ¿Qué pasa? —preguntó mientras se miraban.

— No vuelvas a llorar, eres muy lindo para eso —dijo Changbin mientras sonreía y miraba al frente.

Y Jisung sólo pudo sonrojarse mientras caminaba junto a Changbin sonriendo.