Con Amor...

Capítulo 4.

Maratón (1/3)
Queda prohibido olvidarte

MateoPOV.

Paula acaba de irse. Ni si quiera salí a despedirme, me faltan agallas para salir en su búsqueda y pedirle que se quede. Por mi, por nosotros. Pero sería algo demasiado egoísta de mi parte hacerlo, todo este tiempo he recibido ciertos mensajes, todos con el mismo objetivo "ELLA".

"Debes sentirte como una completa mierda al saber que tenemos a tu princesa en la mira, Paula es blanco fácil..."

Con Amor...

"Tu padre se metió con alguien que nunca debió. Por ello Paula pagará por todos, creo que es hora que te vayas despidiendo."

Con Amor...

"Un día vas a dejar de cuidar a Paula y entonces yo estaré ahí al acecho para acabar con ella."

Con Amor...

E

stoy hasta la puta mierda de tantos mensajes. Todos en los cuales amenaza esa persona con hacer daño a Paula, mi padre ha decidido llevarla de vuelta a casa, si esta persona ve que Paula esta devuelta sin nosotros esperamos que cumpla con lo que hemos planeado. El que piense que Paula ya no me importa.

Obviamente tenemos ojos en todas partes, su casa, el colegio, las calles. Un guarda espaldas que velara por ella día y noche sin que nadie sospeche.

Amor de mi vida. Juro regresar y conquistarte nuevamente, protegerte hasta el fin de mis días, porque tú eres lo que mas me importa en esta vida Paula Russó.

PaulaPOV.

Hace varios días que regrese a casa. No me siento del todo bien, de hecho es un vacío horrible, no es el típico me siento mal pero ya se me pasará ¡NO!. Ojala fuera así, siento que todo este vacío perdurara hasta que Mateo venga y me diga que todo acabo, que todo estará bien y que seguiremos juntos enfrentando obstáculos. Pero eso es algo que se con certeza que no pasará, nunca fui lo suficientemente importante en su vida como para que se quedara junto a mi. Solo y simplemente me alejó, fácil y sencillo.

Damian y Samantha aún no saben que he regresado. No quiero que le pase nada a mi sobrino o sobrina que viene en camino asi que como es sábado le enviare un mensaje a Samantha mencionandole lo mas prudente posible que estoy de vuelta. Ha Damian estoy apunto de llamarle y pedirle que venga a mi casa y se quede a dormir. Extraño tanto aquellas pijamadas en las que no hacíamos nada mas que hacer el tonto y reírnos como dos niños que se divierten con total naturalidad, dejando los problemas y desilusiones a un lado.

-¿Pau..?.- escuche su voz de gay detrás del celular.

-Hola amor.- sonreí.

-Cariño, ¿cómo éstas?. Te extraño maldita perra.- lloriqueo.- ¿Cuando regresas?.

-Pues estoy en casa, con comida china en camino. ¿Te apuntas?.- escuche un pequeño chillido. Se puso feliz al parecer.

-No me jodas Paula, no estoy para tus jodidas bromas.- reí

-Que te estoy diciendo la verdad. ¿Te apuntas o no?.- escuche nuevamente un chillido. Marica.

-Voy, voy, voooooooy.- colgó.