McDannos' One Shot

44 Viernes por la noche II

Su rabia e indignación había sido la inimaginable. La habían traicionado y por si eso fuera poco se lo habían restregado en la cara. Quería, necesitaba, ver con sus propios ojos que Steve la había cambiado por ese...

Miro hacia todos lados y rodeo la casa sigilosamente. Llego a la playa trasera de la casa del comandante y se apoyó en un árbol, para evitar ser vista. Desde ahí observaba con la pareja entraba a la habitación principal, ¡la que era su habitación hasta hace unos meses!

Danny reía a carcajada, aunque era obvio que intentaba ahogarla por todos los medios, mientras Steve le quitaba lentamente por la ropa a medida que lo llenaba de besos. Catherine no lo podía creer. ¡Realmente Steve la había cambiado por ese...! Eso sí, no podía negar que tenía buen cuerpo, no tan bueno como el de Steve, pero era una muy buena vista. Sin embargo no le llegaba a ella ni a los talones

- ¡Maldición! - dijo pisando mal y resbalando del árbol, pero gracias a sus reflejos quedo colgando de sus brazos - ¡S... teve Mc...Ga... ga... rrett... me... pa... ga...ras... esto! - se balanceo y se trepo a otra rama - ¿Dónde estás...? Si esas son las piernas de Danny..., y estas su cabeza. Esos los brazos de Steve, ¿Dónde está la cabeza...? - medito Catherine - ¡Steve le está haciendo...! - y perdiendo el equilibrio cayo del árbol. Afortunadamente supo hacerlo y no se rompió ningún hueso, pero eso no impidió que se llevara un buen golpe.

En ese momento el clima decidió cambiar y se sintió una brisa, a la cual minutos después la acompañaron copiosas gotas. Que en menos de tres minutos convirtió todo en un caos. Catherine se puso de pie y quiso salir de allí, ¡grave error! Hacia unos días Grace y Danny habían decidido hacer un jardín en esa zona, por lo cual toda la tierra estaba removida. Dio un paso y uno los tacos de sus zapatos se quebró, por lo cual cayo de rodillas ensuciando sus pantalones nuevos. Al levantarse se engancho en un tronco rasgándose justo encima del muslo por la parte de atrás. Un rayo cayó muy cerca del lugar haciéndola gritar de miedo, por lo que se regañó mentalmente al instante, si eso hubiese sido una misión ya estuviese muerta.

Pero lo peor de toda la noche llego medio minuto después. Su humillación total

- ¿Catherine? - dijo Danny sorprendido desde el umbral de la puerta trasera de la casa - ¿Qué haces allí? - el muy... estaba con un short blanco que le llegaba hasta el muslo y una camiseta del mismo color que resaltaba su físico

- ¡Tengo frio! ¡Me quiero ir a mi casa! - lloriqueo la mujer

- ¡Catherine! - dijo la voz Steve igualmente sorprendido

- ¿Por qué él se ve bien y yo no? - siguió lloriqueando

- Ven - dijo Danny - Steve ayúdala a entrar

- ¡Pero tengo frio! - protesto el castaño - ¡no me quiero mojar!

- ¡Steve! - regaño Danny

- ¿Y tú eras mi príncipe azul? - dijo Catherine decepcionada

- ¡Animal, muévete! - dijo Danny

- Está bien, está bien - dijo Steve yendo a ayudarla - Dios, quiero mi cama - llevo a la mujer a la sala - ya esta

- Voy por café - dijo Danny -, ve a cambiarte

- No Danny - dijo la chica - no te preocupes, yo me voy

- Si sales ahora tendrás un accidente - dijo Danny - ayer lave un buzo. Te puede servir. Voy por él y una camisa - y se fue

- Es un buen hombre - dijo Catherine

- ¡Pero es mío! - dijo Steve

Por lo visto no había vuelta de hoja. Había perdido a Steve frente a un gran hombre.