1. Sangre.. Dolor

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El ocaso estaba presente en aquel momento como las luces de aquella mansión ya iluminaban cada habitación, los sirvientes preparaban la mesa para la hora de cenar y en ello la señora kim tomo uno de aquellos platillos para así subir a la habitación de su hijo, Kim seok jin, 19 años actualmente parte de la manda Luz dorada y el único Omega de su familia como linaje. Su manada era  tradicionalista, aun conservaban la tradición de Omega debió, alfa fuerte. El Consejo de todos las mandas decidió que se quedarán con sus costumbres al no poder hacer mucho para hacer que cambiarán de opinión, los omegas era quienes sufrían en aquella manada pero que podrían esperar. Después de todo su alfa era despiadado con quien se atreviera a cuestionar su palabras como ordenes. Por ello mismo decidió expandir su territorio pero fue aquello el primer paso para lo que vendría.

La señora kim pérdidas en sus pensamientos no supo cuando llegó a la habitación de su hijo para así entrar y ver lo en la ventana viendo las estrellas. Dejo el plato de comida en la comoda para así dar a conocer su presencia.

-la comida jin

-gracias

-ya no pides comer con nosotros eh?

-que caso tiene si al final me dirás no, madre

-al fin entendiste seok jin... Adiós.

Seokjin después de años encerrado supo hace años tras que sus suplicas jamas serían oídas  aquella que pedían que lo dejaran salir, ser libre pero en cambio como una mala historia aquella donde la princesa encerrada en lo alto de una torre, ese era seok jin, encerrado esperando un milagro o como en mucho de los libros que leyo, enamorarse o en su caso como un cambia formar... Su destino, encontrar aquella persona que estuviera echa para su destino como el. Ese era el mayor sueño de seok jin.

Otra noche sin comer que al final la luz de su habitación fue apagada y así poder descansar para ser libre en el único lugar donde nadie podría prohibirle, en sus sueños.

Gritos... Fuego... Sangre... Oscuridad...

-No!

Grito Jin después de aquella pasadilla, una pesadilla tan real que escucho unos no vientos fuera de su hogar que al final decidió ir a investigar. Abrió la puerta de su habitación para así caminar aquellos pasillos que no cruzaba con frecuencia, bajo las escaleras viendo todo en silencio. Miro a todos lados se su hogar que al final había una luz en aquella puerta donde por última vez fue libre. Con pasos lentos se hacerco para así abrirla

-h-hola... Hay.. Alguien ahí?

Dijo temeroso pero fue remplazada cuando abrió la puerta para así ver a sus padre.. Madre hermano... Todos muertos. Dos en sus formas lobunas como su madre con cuchillas en su pecho, el hacerco al cuerpo de su madre quien tenia la mirada blanca y la sangre por su ropa fina.

-n-no... Esto.. N-no es verdad... Que..

Escucho como pisadas iban acercándose hasta ver a 3 hombres entra y verlo asombrado. Jin sintió temor que se levantó para ver aquellos algas frente a el quienes al sentir el aroma de miedo supieron que era un Omega, el hijo no deseado del imbécil alfa kim.

-vaya.. Miren lo que encontramos.. Un Omega.. Para mejorar el hijo de este imbécil quien eres hermoso?

Ellos eran quienes habían matado a su familia, no sabía que responder en aquel momento. Jin sabia que aquellos hombres no eran de su manada, estaba asustado pero no diría nada, o eso creo hasta oír la voz de mando. Aquella voz que ningún Omega podría negar.

El Omega del Jefe -Namjin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora