Las letras de la muerte

IV: PALABRAS DE LA FAMILIA DEL CRIMINAL Y UN PROBABLE IMPLICADO

Este capítulo lo escribiré en primera persona, pues, esto me sucedió realmente. Por ello, me permito hacerlo. Y por adelantado, anunció que haré lo mismo en la última parte de este compilatorio.

Tras casi dos meses de ocurrido aquel hecho, la familia de José Javier Barreto me contacta vía Facebook. En esa red social había puesto las actualizaciones sobre el caso para ayudar a despejar las dudas que se estaban sembrando esa larga semana. Ellos querían aclarar ciertos detalles y acepté eso. Los cité en mi sitio de trabajo; en la redacción de Nueva Prensa de Oriente.

La tarde del martes 6 de marzo, los padres y dos tías del joven llegaron a mi lugar de labores tal cual acordamos. Para tomar mejores evidencias de este encuentro, en mi perfil de Soundcloud podrán encontrar íntegro el audio con todo lo que me declararon (. Dura casi 23 minutos: https://soundcloud.com/thejca87/declaraciones-de-familiares-de-jose-javier-barreto-curbata).

Lismary y Emerlida Curbata, tías del joven, y Ubaldo Barreto y Genny Curbata, padres del chico, comenzaron declarando que Javier nunca confesó tal crimen, aun cuando hay fuertes indicios de que sí lo ha hecho y la misma policía forense dice que por sus palabras y la inconsistencia de sus declaraciones, se quebró y terminó indicando hasta la ubicación del cadáver de la chica adolescente.

Básicamente, otras cualidades que ellos describieron es que el joven siempre se prestó para ser escritor y daba clases de inglés y otras materias a estudiantes de una de las misiones educativas del gobierno de Maduro. Su blog puede dar cuenta de su afición por los escritos, y lo que quedó de su espacio es Ask.fm es de que le encantaba tomar el papel de algún personaje siniestro.

Meses después de eso, recibo mensajes director en mi perfil de Facebook. El nombre: Johnathan Quijada Curbata. Es primo de José Javier. 

Lo raro, es que los mensajes los escribió en tercera persona, aludiendo que alguien más tiene acceso a la cuenta y que Johnathan estaba en Perú. Se limitó a decir, de forma muy confusa, que nunca tuvo que ver con el crimen y que su trato con José Javier era escaso, y que si alguien seguía con las acusaciones, este tomaría acciones judiciales yendo al consulado venezolano.

Hubo una falla en sus declaraciones: no puede tomar ninguna acción contra nadie desde un consulado. Para ello, si está fuera de Venezuela, tendría que volver nuevamente a territorio nacional y acudir a tribunales. Además, el Cicpc lo busca y, si es cierto que no se encuentra en el país, Interpol puede tener una alerta contra él, apenas lo detecten en un aeropuerto.

Luego de eso, su perfil desapareció.

Otros contactos me aseguraron que Johnathan y José Javier sí tenían contacto y esa manía de personajes siniestros era algo que los unía. De hecho, ambos hacían lo mismo en redes sociales con muchos conocidos o algunos interesados en seguir juegos como ese.

No se ha vuelto a saber de él, y los padres de Verónika dicen haberlo visto una vez en el centro de Puerto la Cruz, por lo que alertaron a la policía, pero fue en vano. Jamás fue detenido.