that girl ‹ chaesoo

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Jisoo

—¿Acaso no te cansas de estar soltera? Al menos con un novio podrías ir a la oficina en auto en vez de ir apretada en el subterráneo. —Jisoo puso sus ojos en blanco mientras hablaba por celular con Yuna, su mejor amiga.

—No, ya te lo dije mil veces. —se quejó la castaña y tomó su laptop.

—¡Pero Jisoo! —exclamó Yuna— No puedes cancelarme la cena de hoy, Changhyuk está muy emocionado por conocerte.

La imagen de Chaeyoung apareció en su mente seguida de una sensación extraña en su estómago.

—No puedo. —repitió— Lo siento Yuna, estoy muy ocupada, te llamo después.

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Jisoo finalizó con su largo trabajo. El escritorio de su casa era un verdadero desastre y no tenía ganas de ordenarlo pero terminó haciéndolo de igual manera. Cabía mencionar que estudiar y trabajar al mismo tiempo era el caos pero a la joven le faltaban sólo unos meses para recibirse por lo que estaba ''casi en paz'' dado que además ya tenía el trabajo y era en su actual empresa. La única diferencis era que después de terminar la universidad la ascenderían a un cargo mucho más alto.

Era demasiado responsable y trabajaba muy duro, así le enseñó su madre. Jisoo nunca se rendiría y menos cuando ya tenía todo asegurado.

Obviamente no necesitaba un hombre.

Pero ese sábado por la noche sería demasiado aburrido. Jisoo no volvió a pisar la florería Radiant Flowers y ya habían pasado dos largas semanas.

Quería hacerlo pero también tenía miedo y mucho. En varias ocasiones después del trabajo fue hacia el lado del local pero al estar a menos de una cuadra, se arrepentía y huía como cobarde.

—¿Qué estarás haciendo hoy por la noche, Chaeyoung? —la castaña estaba tendida en el sofá ¿Y Chaeyoung? ¿En qué andaba?

Chaeyoung

La situación de Chaeyoung aquel sábado por la noche no era muy diferente a la de Jisoo.

En resumen: sofá, Netflix, palomitas de maíz y una gran botella de plástico llena de refresco.

Se le ocurrió volver a ver una triste película japonesa y terminó llorando desconsoladamente ¿Por qué tenía que ser tan sensible? Pero más importante ¿Por qué la vio si sabía que lloraría de nuevo? Es que la historia era tan bonita, se dijo para justificarse a si misma.

Se aferró a su almohadón y abrazó al mismo como si se tratase de una persona. Pensó en lo bien que le vendría tener un gato, así sus noches de Netflix no eran tan solitarias.

Ya eran pasadas las 10 de la noche. No había realmente mucho qué hacer más que seguir mirando la televisión.

De repente sus ojos captaron la portada de una película romántica en donde habían dos chicas.

Y sin poder evitarlo recordó a Jisoo, la elegante joven que había conocido unas semanas atrás. Le pasó porque los perfiles de las chicas de la película eran muy parecidos a los de ellas dos, una era rubia vistiendo colores claros y la otra castaña vistiendo los más oscuros.

Chaeyoung, curiosa, decidió apretar play.

Jisoo

Y sí, el sábado fue aburrido.

Se dijo que tal vez tendría que haber ido a la cena, después de todo SÍ le sobró tiempo pero no quería conocer a nadie y menos salir.

✿✿✿

El lunes llegó acompañado de una gran tormenta. Jisoo pensó en Chaeyoung cuando escuchó las primeras fuertes gotas estamparse contra los grandes ventanales de la oficina.

Soltó un suspiro.

Sería una excusa perfecta para ir, pensó, de seguro la florista no tendría clientes, justo como la última vez.

Tal vez debía pasarse una vez más, sólo dejarse llevar.

Un hormigueo se hacia presente en su estómago cada vez que recordaba el rostro de la muchacha y también sus suaves cabellos rubios.

Se tomó un taxi cuando sus horas de trabajo terminaron, no quería llegar empapada al lugar como la primera vez.