Capitulo 3.

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—TaeHyung, no pensé que vendrías —sonrió abriendo más la puerta para que el castaño pudiese pasar.

—Sabes a que vengo —su rostro era neutro, no tenía intenciones de tener una plática con él.

—Lamento decirte que no podrás —elevó sus hombros—. Ella no está aquí.

—No me quieras ver la cara de idiota, Yoon —espetó con frialdad y enojo.

—Sólo te diré una cosa, TaeHyung —en sus labios se reflejó aquella arrogante sonrisa que lo caracteriza—, Min YoonGi sabe que está viva.

Tragó duramente saliva al escuchar aquella noticia. Tenía que moverse lo más rápido posible, no quería que Aneu volviera a estar con Suga.

[...]

Durante un año Min YoonGi estuvo en ejercicios para que pudiera volver a caminar; realmente le fue difícil. Cuando se enteraron que tenía la posibilidad de pararse por si solo, los chicos no lo pensaron dos veces para que fuera a aquella terapia. Él no lo quería, pues decía que era un castigo por todo el daño que causó. Debemos tener en cuenta que hizo todo aquello por venganza, no tenía la mínima idea del desastre que se estaba contribuyendo gracias a que tenía los ojos vendados y los oídos tapados por la rabia y rencor.

No digo que sea justificante, pero todos cometemos errores y de ellos aprendemos. Somos seres humanos y necesitamos de equivocarnos, una y otra vez hasta que reflexionemos sobre los que hicimos. No cometer el mismo error es madurar, y eso hace Min YoonGi. Él no quiere volver a tropezar con la misma piedra. Ahora que sabe sobre Aneu, desea arreglar todos los vidrios rotos, y mostrarle que no solo puede ser un monstruo, si no también alguien de confianza, que está dispuesto a darle todo con sólo ver su sonrisa. Y aunque aquello sea arriesgado no es motivo de rendirse. No existe la palabra "no puedo" en el vocabulario de Min, y eso es algo de admirarse. No todos piensan así, por ese motivo muy pocos logran sus sueños o alcanzan lo que más desean. Este no es el caso de Suga.

—¿A dónde crees que vas? —frunció el entrecejo.

—Iré con Yoon. —Informó abriendo la puerta, pero está fue cerrada por JungKook.

—Ah —dejó salir un suspiro molesto. El que los chicos estuvieran todos el día, tarde y noche con él lo ponía de mal humor—. Quítate.

—No irás solo —sonrió de lado—, yo te acompaño.

—No quiero.

—Estás actuando como un niño pequeño, hyung —río un poco. Se abrigo con su chamarra y salió de la casa—. Vam-

La puerta fue cerrada en su cara con una tremenda fuerza. ¿Ahora ven de lo que les hablo? Min era cuidado todo el tiempo, y eso lo hacía sentirse un terrible inútil. Camino con cansancio hasta la cocina, ahí estaba SeokJin y Hoseok comiendo. No tenía apetito alguno, desde hace 4 días que no a probado algún alimento. Obvio eso no lo sabían los demás, les hacía creer que comía como se debía, al igual cuando decía " estoy bien ".

¿Sucede algo? —le interrogó J-Hope.

—No. —Apretó sus labios. —Quiero que se vayan de mi casa.

—Ya hablamos de esto, Suga —advirtió SeokJin, limpiando sus labios con una servilleta—. Nos quedaremos aquí.

—¿Creen que haciendo eso harán que cambie de decisión? De alguna manera hablaré con Aneu.

—Ella no quiere saber nada de ti —sus palabras son muy duras, pero creía que era lo mejor—. Es una perdida de tiempo lo que haces.

—¿Quién asegura eso?

—Suga, está más que confirmando cuando decidió quitarse la vida.

Se mantuvo en silencio, no tenía caso seguir hablando. Mojo sus labios y se dio la media vuelta para ir hasta su habitación. Eso había sido un golpe bajo, pero en si tenía razón ¿No?

Al abrir la puerta encontró una hoja en su cama. Frunció el ceño y cerro la puerta. Con algo de miedo agarro la hoja comenzando a leer lo que contenía.

●●

Min, quisiera hablar contigo.
¿Podríamos vernos hoy a las 8:00 pm en el parque que está en la plaza?

Puede que te estés preguntando quien soy, pero eso ahora no importa. Desde la muerte de Aneu quería hablar contigo, hasta ahorita tengo la oportunidad.

PD: duerme bien. ✿
●●

¿Quien mierda iría sin saber quién fue el que escribió aquello? Sólo una persona y esa es YoonGi. No tenía la intención de ir, pero al ver el nombre de la castaña sin pensarlo dos veces salió de su habitación. Faltaban 20 minutos para las 8:00 PM. ¿Desde hace cuánto que está ahí la hoja? La verdadera pregunta es: ¿Quién la escribió? Por un momento pensó en TaeHyung, pero no podía ser él; lo más seguro es que Kim quiera al pálido lejos de Aneu. También pensó en ella, pero Yoon no la dejaría acercarse a él. Era un dolor de cabeza, y sin dura lo resolvería.

—¡YoonGi! —le gritó JiMin saliendo detrás de él—. Mierda, no puedes ir solo.

—Me vale un carajo —subió a su automóvil—. No vayan detrás de mi, les juro que si lo hacen les reventare las bolas.

Encendió el motor y a toda velocidad manejo hasta el lugar donde fue citado. Los demás los siguieron, no podían dejarlo solo.

8:05 PM.

Comenzó a desesperarse, pero en segundos se estaciono. Al tener sus pies en el pavimento volteó a todos lados tratando de encontrar a alguien sospechoso. En el parque no se veía alguna persona, y eso lo hacía creer que llegó demasiado tarde.

—Pensé que nunca vendrías —jadeo al escuchar aquella voz. Lentamente se dio la media vuelta y pudo jurar que su corazón casi se salía.

—Aneu... —susurró tragando duro.




———🌜🌛———

Mis bellxs y preciosxs lectorxs, ¡gracias por leerme! Una tremenda disculpa por mi ausencia, pero vengo a decirles que cada 9 días voy a estar actualizando. Muchos besitos para ustedes, ¡jamás olviden brillar, cosis! Bai. ❤✨;U;

RESET; Min YoonGi. (2)Where stories live. Discover now