Otra Richie Tozier

6 DESUBICADA

Lamento no actualizar tan seguido
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  Charly

¡Tranquila!

Yo ignoro a mi voz y grito de nuevo.

Ahhhhhhhhhhhhhh
¡MALDITO!

-Primero me llama puta- abro varias puertas del corredor dónde dejé a Richie hasta encontrar el baño-, y luego cree que me acostaré con él. ¡¿POR QUIEN ME TOMA ESE IDOTA?!

Cierro la puerta de un golpe que hubiera sonado bastante si la música no estuviera tan alta. Doy una patada a la puerta y le hago una pequeña abolladura.

¡Tranquila, destrozaras todo!

-¡Me importa una mierda si rompo todo!

Estoy más que enojada. Suelto un puñetazo a la pared. Luego otro. Uno más, y así hasta perder la cuenta. Grito una vez mas y me siento en el piso unos momentos.

Entonces, cuando se baja la adrenalina, siento calor en mis manos y bajando de mi labio. Es... ¿Sangre?

Me levanto de un golpe y me miró en el espejo. Solo me molesto más al ver que mi labio sangra por una mordida que me dió Richie. También veo que en mi cuello hay un chupetón. Bajo la mirada a mis nudillos y están rojos y muy golpeados.

Me siento de nuevo en el suelo.

Bueno, no creo que a Richie le haya dolido tanto.

-¡Ay, te preocupas más por el que por mí!

¡No lo hago!, Si algo te pasa a tí también me pasa a tí. Por eso no paro de pensar en lo que pudo pasar si no hubieras golpeado a Richie...

Me río.

-A mí también me hubiera gustado.

  Richie

Llegó con los chicos. Ya están sentados en el piso, con unos vasos rojos en las manos o cerca de ellos.

Charly no esta por ningún lado. De seguro ya se fué. ¡Vaya chica, Richie Tozier! ¿Cómo me fuí a enamorar de esta perra?

No. Ella no es una perra, pero tampoco quiero estar enamorado.

-¿Ya terminaron?- me pregunta Stan cuando me siento en el suelo con el grupo.

-¿De qué diablos estás hablando?- Eddie me acerca un vaso rojo. Huelo su contenido antes de dar un largo trago. Es vodka.

-¡V-vamos Richie! Charly y t-tu desaparecieron un buen rato, traes el pelo r-revuelto y...

-¡Y Charly trae un chupetón en el cuello!- termina Stan mirando atrás de mí.

Volteo el cuerpo mientras doy otro trago a mi vaso.

Si, tiene un chupetón en el cuello sobre la clavícula. Me encuentro con sus ojos y me miran enojados. Llega con nosotros y se sienta en frente de mí.

-¿Empezaron a tomar?- le quita el vaso a Eddie-, ¿Y sin mí?

-No sabíamos cuanto iban a tardar- se ríe Stan mientras me dá un codazo.

-Sí, no sabíamos cuanto ibas a tardar con Henry...- le ataco y me voltea a ver sorprendida -...¿O con quién estabas? Es que, ya sabes, son tantos...

Mis tres amigos y la chica que está frente a mí se me quedan viendo.

-Te importa muy poco, ¿no lo crees Tozier? Deja los celos de una vez.