la verdad escondida

Capitulo 12: Eiji

Por fin llego la hora que todo el universo estaba esperando, la puerta del lado de los demonios se abrió, salían triunfantes, como si la victoria ya fuese suya, la gente gritaba sus nombres, al otro lado del terreno de combate se abría la puerta de Aratani, cuando salió los gritos de la gente estaban por encima de todo, yuudai observaba a todo el mundo y luego a Aratani, no podía evitar preocuparse.

Aratani daba unos pasos observando la gente, aquella situación de gente aclamando su nombre y gritando cosas que nunca pensaba que le dirían le encantaba. Ese momento tuvo que acabar para poder centrase otra vez en el combate.

Se coloco en su marca y cerró los ojos controlando su respiración hasta oír el pitido de inicio, por su cabeza pasaban muchas cosas que intentaba olvidar en ese momento

Yuudai la observaba y sabía cada una de ellas.

El pitido se escucho y el sonido de salida se escucho, los demonios avanzaban a gran velocidad en dirección a la que sería su base.

Aratani desplego su esquipo, sacando la katana que yuudai le había hecho, abrió los ojos y embozo un "estoy lista". En ese momento con como si de un rayo se tratase desapareció de la vista de todo el mundo, los demonios se detuvieron al verla desaparecer

- mierda se suponía que no era tan rápida

Todos los demonios se miraban sin saber dónde mirar

Aratani apareció en la cima de una colina como si de un héroe se tratase, tras de ella una estela de polvo levantado y un impacto sordo en los oídos de todo el mundo, efecto causado por la velocidad.

-¡¿me buscabais?! ¡Pues venid a por mí! - dijo amenazándolos con la katana

Los demonios corrían hacia ella mientras permanecía inmóvil

- sin piedad chicos - se decían entre ellos

Aratani mostro una sonrisa e inclinándose hacia adelante volvió a desaparecer con un estallido. Nadie vio nada, todos se pararon mirando a su alrededor hasta que la sangre voló a la cara de los demonios, el demonio que estaba en primer lugar había sido abatido dejándolo fuera de juego

Aratani apareció al pie de la colina y con un golpe de muñeca hizo que la sangre se desprendiera de la hoja dejando una mancha en el suelo

Dos de los demonios mas grandes desaparecieron, de verdad hacían honor al título de que los demonios eran los más rápidos, en un segundo dos rodillazos estaban llegando por ambos lados a Aratani. Aratani se fijo en ambos contrincantes y le dio tiempo de cubrir su frente recibiendo por completo el golpe en su espalda.

Cayó al suelo tosiendo algo de sangre, otro demonio cargo en su puño algo de energía y se dirigió hacia ella con su famosa velocidad, en 0,1 segundo estaba enfrente de ella lanzando el puñetazo demoledor.

Yuudai lo estaba pasando mal viendo esto, solo podía creer en ella y sus posibilidades.

El puñetazo del demonio fue desviado por Aratani con su brazo izquierdo y cuando el mismo y los demás se dieron cuenta de lo que había pasado Aratani tenía en su brazo derecho una esfera de su elemento

- explosión....

Fue lo último que dijo antes que una gran nube de polvo y todos los elementos retenida apenas por el campo de fuerza que envolvía el campo de batalla. Cuando la nube se disipo había un cráter enorme y en medio Aratani de pie sujetando el cadáver de un demonio que se desangraba por cada poro de su piel.